Muñoz hace de la vivienda pública su primera bandera como alcalde de Sevilla
Antonio Muñoz (PSOE) ofrecía este lunes su primera rueda de prensa como alcalde de Sevilla, y le estuvo dando vueltas a la cuestión a la que quería ponerle el foco para un acto que él mismo consideraba simbólico. Y al final optó por la vivienda pública, con el argumento de que 2022 va a ser un año clave con la puesta en marcha de nuevas promociones y rehabilitaciones que impulsa el gobierno municipal y que aglutinan a más de 500 nuevos hogares. La inversión total, subrayó, supera los 55 millones de euros.
Las cifras no son nuevas, pero Muñoz las ponía encima de la mesa para incidir en que Emvisesa, la empresa municipal de vivienda, va a ser un actor más en el mercado inmobiliario sevillano para ayudar a afrontar lo que reconoció como uno de los principales problemas de Sevilla. Y la excusa para hablar de todo esto la ofreció la licitación de la que es “la mayor obra pública iniciada en la ciudad desde hace más de 15 años”, la promoción de Hacienda El Rosario, un nuevo barrio en la zona este de la capital con 218 viviendas públicas de alquiler.
Al margen de una apuesta política, este impulso a la vivienda pública viene impuesto por una necesidad social, como demuestra que Emvisesa arrastra una bolsa con más de 12.000 aspirantes, la mayoría menores de 35 años. Y es también la continuación de una senda trazada por Juan Espadas, que en lo tocante a poner en marcha promociones municipales se encontró con un terreno baldío de varios años y en el que todo lo que se hiciera supondría una mejora sustancial. De hecho, en la hora de su adiós como alcalde sacó pecho con que en seis años Emvisesa había adjudicado 1.257 viviendas y adquirido otras 468 para su gestión, dejando además trazada una línea de acción con su flamante Plan Municipal de la Vivienda.
Abaratar el mercado y fijar población
La de Hacienda El Rosario (siete bloques de pisos que deberían estar terminados a finales de 2024) es la más importante de las iniciativas que tiene por delante la empresa municipal, que a lo largo de este año licitará otros seis proyectos para así superar esa anunciada cifra de 500 pisos. Si a eso se le unen las cerca de 20.000 viviendas previstas para los próximos años por el sector privado sobre todo en la zona sur de la ciudad, el resultado según Muñoz es un aumento de la oferta que puede ayudar a dos cuestiones: abaratar el mercado inmobiliario y aumentar la población de la capital, que lleva años estancada por debajo de los 700.000 habitantes.
Para reiterar que la vivienda va a ser una de sus banderas como alcalde, Muñoz anunció otra “decisión estratégica”, como es que Emvisesa asuma la gestión de todo el parque inmobiliario municipal. Y es que aunque la mayoría de estos pisos los controla la empresa municipal (2.834), resulta que en el Ayuntamiento hispalense hay otros dos organismos que tienen pisos públicos, por un lado Patrimonio con 867 y por otro Urbanismo con 130. Este millar largo de viviendas se transferirán ahora a Emvisesa, lo que, a juicio del alcalde, optimizará la gestión con “una mejora de la conservación y el mantenimiento”.
“Desde luego que las políticas públicas de vivienda van a seguir siendo prioritarias en los próximos años”, remachaba Muñoz, que desplegaba así su primera bandera en su primera rueda de prensa, justo el día en el que se cumplía una semana de su proclamación como alcalde de Sevilla.
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