EDUCACIÓN

De una propuesta “friki” en clase a un proyecto de ciudad: Sevilla incorpora la Avenida Matemáticas a su callejero

Las matemáticas “tienen mala fama”. Pero también “algo que cuando las conoces, gustan” y “enganchan”. Los alumnos del Colegio Montaigne corroboran las palabras de su profesor José Carlos Gámez, un firme defensor de esta disciplina científica o, como él mismo se define, “un friki de las matemáticas”. Precisamente, ese “frikismo” del que hace gala ha llevado a este docente y a sus alumnos a convertir un proyecto que nació en el contexto del aula en un logro para la ciudad.

“Nuestro profesor tiene muchas ideas locas”, comienza Lucía Ordóñez, alumna egresada del Montigne y una de las coordinadoras del proyecto, cuando se propone explicar cómo surgió la iniciativa de bautizar una de las calles de Sevilla con el nombre de la asignatura que imparte José Carlos. La “locura” en cuestión brotó en la mente del profesor hace varios años, cuando un día de compras descubrió que el Distrito Norte de la capital reconocía con un rótulo a la Biología, Química o Astronomía, entre otras disciplinas, pero no así a las matemáticas.

“Entonces llegué a clase y les propuse a mis niños de cuarto de la ESO conseguir que el Ayuntamiento concediera ese nombre a una calle”, comenta a este periódico el promotor de la idea. Aquello sucedió en 2019, y desde entonces, los alumnos se volcaron hasta hacer realidad una demanda que se habían marcado como propósito. Años después, y tras lograr que se aprobara por unanimidad en el Pleno del Ayuntamiento hispalense celebrado el pasado mes de marzo, Sevilla ha incorporado a su callejero la Avenida de las Matemáticas. “Hemos subido de nivel”, ríe minutos antes de participar en el acto de inauguración de esta vía, que ha tenido lugar al mediodía de este segundo lunes de enero.

Reivindicación de “frikismo”

Día en que una representación de la comunidad matemática de Sevilla se ha congregado en torno a la recién estrenada rotulación para celebrar que la capital andaluza ya cuenta con una avenida en honor a esta ciencia, convencida de que este pequeño gesto contribuye a “cambiar su imagen ante la sociedad”, como llevan años trabajando desde diferentes instituciones. A todas ellas ha dedicado el profesor del Colegio Montaigne palabras de agradecimiento por respaldar lo que surgió como “una idea loca de un profe de colegio”.

Entre todas las personas e instituciones “que han hecho posible el proyecto”, agradeció al Ayuntamiento de Sevilla, representado por el alcalde, Antonio Muñoz, y “la labor y apoyo de la Facultad de Matemáticas”, cuyo decano, Alfonso Carriazo, celebra este lunes este homenaje “con enorme alegría”. A su modo de ver, el homenaje demuestra “que la sociedad está ávida de conocimientos matemáticos”, según manifiesta a elDiario.es Andalucía. Asimismo, José Carlos Gámez se ha mostrado agradecido por la colaboración que le brindó el entonces director del Instituto de Matemáticas de la Universidad de Sevilla (IMUS), Emilio Carrizosa. Para este catedrático, la rotulación supone “un reconocimiento que hace la ciudad al papel fundamental que juegan las matemáticas en la generación de conocimiento y como palanca al desarrollo”.

Mención especial dedicó el docente a los alumnos que iniciaron la propuesta y que hoy se encuentran en primero de carrera, así como a los que recogieron su testigo y continuaron trabajando por sacarla adelante. Muchos de ellos se han contagiado de “la pasión que transmite” el profesor en las clases y se consideran hoy “frikis de las mates”. Tanto es así que David Ribero, quien coordinó junto a Lucía la iniciativa en los albores del proyecto, reconoce a este medio que la experiencia de coordinador fue determinante para que se decantara por el doble grado de Ingeniería con ADE Bilingüe que cursa en estos momentos, ya que combinaba su pasión por los números con la vocación que se le había despertado por “dirigir personas”.

Además de agradecer, este profesor comprometido con la divulgación de las ciencias aprovechó su intervención para hacer un alegato en favor del “frikismo”. “Ser friki es sinónimo de ser apasionado de algo y de que das todo lo que está en tu mano para conocer y compartir”, dijo Gámez. Por eso, los alumnos que han tenido a José Carlos como profesor coinciden en señalar como virtud su capacidad de “inspirar confianza e ilusión” más allá de las matemáticas. De ahí que el proyecto de la calle lograse implicar a todo el alumnado “con las mates como centro”, pero dando alas a cada uno de ellos para explorar sus propios intereses. “Quienes querían ser periodistas se dedicaron a redactar, los que querían hacer derecho investigaron cómo hacer una propuesta al Ayuntamiento”, expone el profesor en línea similar a sus alumnos.

“Ciudad de futuro”

Por eso, aunque el docente defienda que los números tienen la capacidad de suscitar “satisfacción” cuando se aplican y se encuentra su utilidad ante la vida cotidiana, los alumnos atribuyen la pasión que sienten hoy por esta disciplina, no solo a su encanto natural, sino más bien a quién imparte la asignatura.

Con esta noticia, no solo han dejado “su huella” en la ciudad “hablando de mates”, sino que han logrado que la comunidad científica en Sevilla esté doblemente “de celebración”: despidieron el 2022 celebrando la elección de Inteligencia Artificial como palabra del año y arrancan nuevo curso con la recién inaugurada Avenida de las Matemáticas. Festejo al que se ha sumado el alcalde de Sevilla reiterando “la satisfacción” que ha suscitado la nueva rotulación y poniendo en valor que, en esta ocasión, se haya reconocido en el callejero a una disciplina científica “muy útil”, a pesar de “su mala fama” en la etapa escolar. “Una ciudad que mire al futuro con optimismo lo tiene que hacer sí o sí de la mano de la ciencia” y, especialmente, de los cálculos matemáticos, ha indicado el regidor aludiendo a la actividad que a unos metros de allí se estará llevando a cabo en el seno de la Agencia Espacial. “Sin ciencia no hay futuro”, ha remachado Muñoz.

De este modo, Sevilla estrena año inaugurando una nueva vía que llega cargada de mensajes. “Esperemos que ciudadanos y visitantes que pasen por la Avenida Matemáticas no piensen en la disciplina como una tortura (o un jeroglífico indescifrable) de los tiempos de bachillerato, sino más bien como la disciplina que nos puede ayudar a vivir en una sociedad más avanzada y más justa”, ha añadido en este sentido Carrizosa. Con todo, la historia que late detrás de la nueva avenida encierra un denominador común para los amantes o no de los números: “lo que se trabaja con pasión se consigue”. “Sed frikis, por favor, porque de esa forma, el ser humano, nuestra sociedad, siempre mantendrá la ilusión de seguir aprendiendo”, ha concluido el profesor que se ha ganado a sus alumnos enseñándoles mucho más que matemáticas.