¿Dónde vives? Así está la contaminación del aire que tú respiras

Aunque la ministra de Medio Ambiente, Isabel García Tejerina, ha restado importancia a las advertencias de la Unión Europea sobre los niveles del polución en España, los efectos nocivos de la contaminación son cada vez más demostrados. En la salud respiratoria, en los problemas cardiovasculares, en la irritación ocular... 

En España, la población que soporta niveles nocivos de ozono troposférico ha crecido un 40% en cinco años y supera los 13 millones de personas. En Madrid y Barcelona, las concentraciones de dióxido de nitrógeno también superan los límites legales de manera que la Comisión Europea ha abierto un expediente sancionador contra España. Tejerina ha interpretado por esto, que los responsables de gestionar un aire con exceso de polución son los ayuntamientos gobernados ahora “por sus confluencias”.

Con todo, la organización Ecologistas en Acción ha calculado que “hasta el 94% de la población española” soporta niveles de contaminación del aire perjudiciales si se atiende a los baremos de la Organización Mundial de la Salud (que son más estrictos que los de la normativa de la Unión Europea). Uno de los reproches habituales hacia las administraciones sobre la cuestión de la calidad del aire es la poca información que se ofrece a los ciudadanos. Poco accesible y, en ocasiones farragosa. Así que la propia Ecologistas en Acción (que publica anualmente estudios sobre las concentraciones de polución) ha desarrollado junto a la Universidad Politécnica de Catalunya una aplicación móvil airACT que “muestra la exposición en tiempo real a los diferentes contaminantes en el lugar que se elija ”. Así, puede verse cómo está el dióxido en Valencia, Madrid o Huelva. O comprobar si se han disparado los niveles de ozono en Castilla y León o las micropartículas en Sevilla.

La herramienta, disponible para dispositivos Android, no es más que un mapa de España donde se señalan los puntos de medición. Según el contaminante y el momento, la aplicación muestra el estado de los niveles “en función del grado de afectación a la salud según la OMS y según los niveles legales en la Unión Europea