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Los impulsores de la querella argentina reclaman que se vuelva a procesar al exministro Martín Villa

El exministro Rodolfo Martín Villa

Marta Borraz

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Los promotores de la llamada Querella Argentina continúan en su pelea por sentar en el banquillo al exministro Rodolfo Martín Villa por crímenes contra la humanidad cometidos durante la Transición. La Cámara Federal de Casación Penal se ha reunido este jueves por videoconferencia para escuchar a las partes en el marco del recurso que interpusieron los querellantes contra la decisión que tomó el diciembre pasado. Entonces, el tribunal revocó el procesamiento del exministro que había puesto en marcha la jueza María Servini por la muerte de varias personas entre 1976 y 1978.

Martín Villa recurrió en su momento el procesamiento y Casación le dio la razón, a lo que los promotores de la querella, agrupados en la Coordinadora estatal de apoyo a la Querella Argentina contra crímenes del franquismo (CeAqua), respondieron también recurriendo. Ocho meses después, los letrados de los querellantes y la defensa del exministro han intervenido para exponer sus argumentos.

Los primeros reclaman su procesamiento al considerar que el fallo emitido por el tribunal que lo rechazó es “arbitrario” porque “exige un plus de fundamentación que está sobradamente probado en el expediente”, ha afirmado en la vista el abogado Eduardo Fachal. Los querellantes coinciden con la calificación que inicialmente hizo la magistrada Servini revocada después por Casación y que atribuyó a Martín Villa cuatro delitos de homicidio agravado en un contexto de crímenes contra la humanidad.

Fueron los asesinatos de Pedro María Martínez Ocio, Romualdo Barroso Chaparro, Francisco Aznar Clemente, asesinados durante la masacre de Vitoria el 3 de marzo de 1976 a consecuencia del ataque de la Policía Armada, que gaseó y disparó a manifestantes, matando en total a cinco personas. Y el de Germán Rodríguez Saíz, asesinado en los sucesos de los Sanfermines de Pamplona en julio de 1978, cuando las fuerzas de seguridad cargaron tras el despliegue de una pancarta en favor de la amnistía total. Rodríguez Saíz recibió un tiro en la frente.

Tanto su hermano Fermín Rodríguez, como Andoni Txasko, miembro de la asociación Víctimas 3 de marzo, han estado presentes en la vista como querellantes. “Que Martín Villa sea procesado es algo que estamos persiguiendo desde siempre y ha sido imposible en el estado español. El objetivo es romper en Argentina toda la impunidad que existe aquí, pero es una vergüenza que haya que recurrir al exterior habiendo pruebas”, sostiene el segundo, que al día siguiente de los sucesos de Vitoria, en la misma zona, recibió una paliza por parte de agentes del orden público y perdió casi la totalidad de la visión.

“Ataque generalizado y sistemático”

Los letrados impulsores de la querella han defendido que durante aquellos años hubo un “ataque generalizado y sistemático dirigido contra la población civil, dándose el elemento político derivado de una política del Estado”, en palabras del también abogado Luis María Calcagno. Los querellantes defienden, como lo hizo Servini, que Martín Villa, como ministro de Relaciones Sindicales primero y de Gobernación después, ocupó “una posición preponderante en esa estructura organizada de poder a través de la cual se propagaron las órdenes hacia quienes resultaron los ejecutores directos de los delitos”.

Sin embargo, la Cámara Federal de Casación Penal decidió frenar el procesamiento asegurando que no puede afirmarse que fueran delitos de lesa humanidad y apelando a la “falta de mérito”. “Esto significa que el tribunal declara que se requiere profundizar en la investigación”, explica Jacinto Lara, abogado de CeAqua.

Por su parte, el letrado que defiende a Martín Villa, Fernando Goldaracena, ha reclamado que el auto por el que se detiene el procesamiento sea firme y ha asegurado que “no existe ninguna prueba que acredite ese supuesto plan sistemático de ataque a la población civil” ni tampoco “la supuesta autoría inmediata que le endilgan” al exministro “por su supuesta posición en el Gobierno”.

Ahora, una vez celebrada la audiencia de este jueves, el tribunal deberá decidir en unos meses mediante resolución escrita si procesa o no al exministro por los crímenes referidos. “Sería la primera vez que se enjuicie a alguien por crímenes franquistas, a diferencia de lo que ocurre en España, donde nos archivan todas las querella que se presentan. Su procesamiento generaría un hecho judicial extraordinario en relación con los crímenes franquistas y un impulso procesal determinante”, apunta Lara.

En todo caso, aunque Martín Villa no sea finalmente procesado en este proceso, continuará imputado en la querella argentina por un total de 12 homicidios perpetrados durante la Transición sobre los que Servini ha decretado “falta de mérito”. Es decir, considera que hace falta más investigación.

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