Santiago de Compostela, 16 ago (EFE).- El presidente de la Xunta, Alfonso Rueda, ha señalado que Galicia vive de nuevo “un día complicado” a causa de los incendios, con la dificultad “añadida” de que el humo derivado de los focos activos impide que las bases aéreas de Ourense, más próximas a los principales fuegos, estén “inoperativas”.
“Muchos medios aéreos debido al humo no van a poder operar y otros están operando desde otras bases aéreas”, ha declarado Rueda desde el Centro de Coordinación Operativa (CECOP), en Ourense, al que ha acudido para hacer un seguimiento de los incendios forestales, junto a la conselleira de Medio Rural, María José Gómez.
“Ya me gustaría decir lo contrario, pero hoy vuelve a ser un día complicado”, ha manifestado Rueda, que ha agregado que actualmente se presentan “bastantes dificultades” en la extinción de incendios debido a una circunstancias climatológicas “que siguen siendo muy adversas”, con altas temperaturas y probabilidad de corrientes térmicas y viento “que hace que los incendios varíen repentinamente de dirección”.
Rueda ha recordado que en Galicia hay aún 12 incendios activos, la mayoría concentrados en Ourense, además de uno en Agolada (Pontevedra) y otro en Muxía (A Coruña).
El presidente de la Xunta ha señalado que los servicios de extinción, a los que ha vuelto a agradecer su trabajo, han logrado controlar tres incendios - los de A Fonsagrada-Monteseiro (150 ha), Verín-Mourazos (9 ha) y A Estrada-Souto (20 ha)-; estabilizar otros tres -Toques-San Martiño de Oleiros (300 ha), Montederramo-Paredes (120 ha) y Dozón-O Castro (400 ha); y dar por extinguido el de Seixalbo, en Ourense.
En relación a este último incendio, Rueda ha señalado que todo indica que fue causado por la circulación de un tren y que, aunque se trataba de un fuego que en principio “dio muchos problemas” por la cercanía a núcleos de población, ya está extinguido.
Sin embargo, ha recordado que “a mayores de los incendios activos” todos los días se están produciendo “muchísimos incendios” y solo en el día de ayer se decretaron 39 nuevos, de los cuales los servicios de extinción fueron capaces de apagar 29 de ellos.
En este sentido, ha hecho un llamamiento a la “prudencia” y ha denunciado que muchos de estos fuegos tienen “todos los indicios de ser provocados” y de haberse producido “cuando se sabía que en ese momento no había medios de extinción porque estaban ocupados en otros lugares”.