La tajante postura de Guillermo del Toro frente a la inteligencia artificial: “Prefiero morir”

Hace apenas un mes y medio, el diario The Wall Street Journal compartió en exclusiva que OpenAI, la empresa detrás de ChatGPT, estaba desarrollando una película de animación hecha íntegramente con inteligencia artificial. La noticia reabrió el debate sobre el uso de esta tecnología en la industria del entretenimiento, especialmente en las obras audiovisuales como largometrajes y series de televisión.

El debate sigue abierto y se prevé que siga encima de la mesa durante una larga temporada. El último en pronunciarse al respecto ha sido Guillermo del Toro, el cineasta mexicano que acaba de estrenar Frankenstein, su nueva película en la que reinventa el clásico de Mary Shelley de 1818.

En una entrevista para NPR con motivo de la llegada del largometraje a las salas de cine, el director de clásicos como El laberinto del fauno (2006) no dejó lugar a dudas en su postura sobre el auge de esta tecnología. “Mi preocupación no es la inteligencia artificial, sino la estupidez natural. Creo que eso es lo que impulsa la mayoría de las peores características del mundo”, sentenció entonces Del Toro.

El también guionista y productor de cine fue tajante al compartir que no usará la inteligencia artificial bajo ningún concepto. “La IA, en particular la generativa, no me interesa ni me interesará jamás. Tengo 61 años y espero poder seguir sin interesarme en absoluto en su uso hasta que me muera. El otro día, alguien me escribió un correo electrónico preguntándome: ¿Cuál es su postura sobre la IA? Mi respuesta fue muy breve. Dije: Prefiero morir”. 

La primera actriz creada con IA y otros proyectos

Las palabras de Guillermo del Toro coinciden con la reciente polémica que rodea a Tilly Norwood, quien según sus creadores es la primera actriz de Hollywood creada íntegramente por inteligencia artificial. El estudio Xicoia la presentó asegurando que este personaje virtual podría convertirse en “la próxima Natalie Portman o Scarlett Johansson”. 

“La gente se da cuenta de que su creatividad no tiene que estar limitada por el presupuesto. No hay restricciones creativas, y por eso la inteligencia artificial puede ser una verdadera ventaja. Solo se trata de cambiar la perspectiva”, compartió la empresa tecnológica después de presentar a Norwood. No todos en Hollywood comparten esta visión. 

La noticia ha generado una ola de indignación, especialmente en el gremio de actores y actrices. “Tilly Norwood no es una actriz, es un personaje generado por un programa informático que se entrenó con el trabajo de innumerables intérpretes profesionales, sin permiso ni compensación”, ha denunciado en un duro comunicado el sindicato de actores SAG-AFTRA.