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El nuevo líder del PSOE no es el político más tuitero (ni parece que vaya a serlo)

Pedro Sánchez ha demostrado que el número de followers no importa para ganar unas primarias

Antonio Rull

Madrid —

Que los políticos en España usen las redes sociales con objetivos electoralistas no es algo que vayamos a explicar aquí porque se asume y hay más casos que dedos tenemos en la mano que confirman esa hipótesis. Superado el efecto Obama, son ya un canal más frente a la tradicional publicidad electoral. El problema viene una vez pasadas las elecciones, cuando la mayoría de ellos se olvida de sus perfiles en redes sociales, ergo de seguir comunicándose de forma directa con los ciudadanos y, en su caso, los votantes.

Entre los dos principales candidatos a la secretaría general del PSOE había, a priori, una gran diferencia al respecto del uso de las redes sociales, al menos en su constancia y en sus seguidores. Tomando como inicio la fecha del 12 de junio, momento en que Pedro Sánchez anuncia su candidatura, este tenía 14.938 followers en Twitter mientras que el otro candidato, Eduardo Madina, que confirmaría su candidatura un día después, contaba ya entonces con 92.403. Desde esa fecha, Sánchez ha crecido en unos 600 seguidores diarios mientras que Madina, unos 175 aproximadamente. El primero tiene hoy 35.200 y el segundo 98.100.

A pesar de los seguidores, tanto durante la campaña como la noche en que se conoció el nuevo secretario general de los socialistas, Pedro Sánchez fue el más citado, con más de 200.000 tuits donde se mencionaba su usuario frente a los 176.000 de Eduardo Madina. Prorrateando esas cifras con respecto a la diferencia de seguidores, el impacto de Sánchez es aún mayor.

Fuentes del equipo de Eduardo Madina consultadas por eldiario.es confirman que la mayoría de los tuits que ha mandado desde que se creó su cuenta los manda él personalmente, fruto de su conocimiento y ganas en redes sociales, a pesar de disponer de un equipo, @equipomadina. Pedro Sánchez en cambio muestra signos claros de falta de entendimiento o ganas, puesto que toda su actividad más destacada se centra en estas primarias, que además sus cuentas han sido gestionadas por un equipo y no por él directa y personalmente. Tal y como confirman fuentes del equipo de Sánchez consultadas por eldiario.es, solo uno de cada cinco de los mensajes los enviaba el propio Pedro Sánchez.

Comparativa de seguidores en Twitter según Twittercounter:

También en los perfiles que siguen hay mucha diferencia. Mientras que Madina sigue a 638 cuentas de Twitter, Pedro Sánchez sigue a casi 5.500, más propio de la conocidísima estrategia “te sigo y tú me sigues”.

Si de los valores cuantitativos básicos de Twitter dependiera, el nuevo secretario general del PSOE sería Eduardo Madina, pero la realidad demuestra que el número de seguidores en redes sociales no supone un valor definitivo para tomar esas conclusiones.

Mientras que la comunidad de Eduardo Madina es más trabajada y continuada, Pedro Sánchez se ha labrado una comunidad afín en muy poco tiempo, fruto de la amplia actividad que ha tenido en su perfil desde que anunciara su candidatura a las primarias, con el doble de publicaciones al día que Madina.

Tuits enviados por los candidatos según el informe de Pirendo:

A pesar de esa intensidad, Pedro Sánchez no ha vuelto a tuitear (ni siquiera responder tuits) durante más de 24 horas tras ganar las primarias, mientras que su oponente sí lo ha hecho, con un último tuit enviado este lunes a las 12:33. Si no es una mera cuestión de resaca poselectoral, Pedro Sánchez no va a ser un secretario general tuitero más allá de cuando haya motivos electoralistas para serlo, como está demostrando al echarle cuenta solamente en este período de primarias. Su equipo comenta a eldiario.es que sí va a seguir teniendo actividad en redes sociales, si bien “necesita ayuda y equipo”.

En Facebook se repite la estrategia en cuestión de crecimiento y publicaciones. Mientras que Eduardo Madina cuenta con 10.432 Me Gusta y un crecimiento de ese número de un 16%, Sánchez tiene 17.000 con un crecimiento del 116%. Mientras que el primero realiza una publicación al día de media, el nuevo secretario general del PSOE viene publicando 17 veces al día. En el tipo de publicación sí que coinciden siendo el 70% de ellas fotografías.

Con esas cifras, Sánchez ha conseguido colocarse en el número 58 entre las páginas de políticos en Facebook, tan solo un puesto por debajo de Barack Obama, según el ranking de likealyzer consultado por eldiario.es. También se desprende de los datos que Sánchez ha empezado su actividad en Facebook con motivo de las primarias del PSOE, al contrario que Madina que cuenta con una línea más continuada (igual que en Twitter).

Análisis de las páginas en Facebook según Wildfire:

¿Quién gestiona estas redes sociales?

Por supuesto que ellos no se encargan de todo, aunque sí que envían algún tuit personalmente, y cuentan con un equipo que trabaja con los mismos objetivos que el resto del equipo de campaña que lleva a cabo en otros canales, formatos y soportes.

El equipo en redes sociales de Pedro Sánchez lo forman siete personas, dos de los cuales se encargan exclusivamente de la gestión de sus cuentas en Twitter y Facebook, mientras otro equipo de tres personas redacta los contenidos y mensajes que se publicarían y las dos últimas del apoyo general. Este equipo siempre se encuentra bajo la supervisión de la dirección de campaña y de las claves de cada día que el propio Sánchez proporcionaba al equipo.

Por su parte, Eduardo Madina tiene entre sus filas a cuatro personas encargadas de sus redes sociales, que cuentan con un equipo de colaboradores que se encargan de la “respuesta inmediata”. Sin duda, su labor ha sido más continuista y natural, puesto que Madina ya contaba con una gran base de seguidores, que no explotó tan exageradamente como en el caso de Sánchez en el momento del anuncio de la candidatura ni durante la campaña.

NOTA: Actualizamos la información con el tiempo que ha pasado para que Pedro Sánchez volviera a utilizar sus redes sociales, quedando el lunes 14 totalmente en blanco para el nuevo secretario general del PSOE.

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