De tapas por España: las 5 mejores tapas típicas de los bares de Galicia

Adrián Roque

6 de julio de 2025 09:00 h

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Las tapas son una de las mejores formas de adentrarse en la cultura culinaria de cualquier región de España, y Galicia no es la excepción. En esta región, las tapas no solo son un plato para acompañar una bebida, sino una auténtica muestra de la historia gastronómica local. Los bares de Galicia ofrecen una combinación única de sabores tradicionales y recetas que han perdurado a lo largo de los siglos.

A continuación, te presentamos las 5 mejores tapas típicas que no puedes dejar de probar en Galicia. Desde los clásicos con una vuelta de tuerca hasta los platos más tradicionales, estas tapas te invitarán a disfrutar de lo mejor de la gastronomía gallega.

1. Pulpo a la gallega (Pulpo a feira)

El pulpo a la gallega es, sin duda, la tapa más famosa de la región y uno de los platos más representativos de la gastronomía gallega. Cocinado en su punto exacto, el pulpo se sirve en rodajas, espolvoreado con pimentón, sal gruesa y un toque de aceite de oliva virgen extra. El sabor de este molusco es inconfundible, y se disfruta especialmente cuando se acompaña de unas “cachelas” (rodajas de patatas cocidas). Este plato, que se sirve tradicionalmente en las ferias y fiestas de Galicia, es una auténtica joya gastronómica.

2. Empanada gallega

La empanada gallega es otro clásico que no puede faltar en la mesa de un bar gallego. Aunque hay diversas versiones, la más tradicional se hace con atún, cebolla, pimientos y tomate. La masa crujiente, combinada con el relleno sabroso, crea una tapa perfecta para cualquier momento del día. La empanada gallega se sirve en porciones generosas y es ideal para compartir. Si bien el atún es el más común, también se pueden encontrar empanadas rellenas de carne, mariscos o incluso bacalao.

3. Pimientos de Padrón

Los pimientos de Padrón son un clásico irresistible en Galicia, especialmente en los meses de verano. Pequeños y de sabor suave, se fríen en aceite de oliva y se espolvorean con sal gruesa. Sin embargo, hay una característica que los hace aún más interesantes: algunos de estos pimientos son picantes, lo que convierte su degustación en una auténtica lotería. “Los pimientos de Padrón, unos pican y otros no”, es una frase que muchos visitantes de Galicia repiten mientras disfrutan de esta tapa tan divertida como sabrosa.

4. Lacón con grelos

El lacón con grelos es otro de los grandes emblemas de la cocina gallega. Este plato, tradicionalmente consumido en invierno, consiste en lacón (carne salada de cerdo) acompañado de grelos (hojas de nabos) y patatas. La mezcla de sabores es contundente y sabrosa, perfecta para quienes buscan algo reconfortante. Aunque no siempre se sirve como tapa, muchos bares gallegos lo ofrecen en pequeñas raciones, especialmente en los días fríos.

5. Caldo Gallego

El Caldo Gallego es una de las tapas más reconfortantes y tradicionales de la región. Esta sopa sustanciosa es el plato perfecto para los días fríos y es un ejemplo claro de la cocina gallega en su versión más auténtica. El caldo se prepara con una base de patatas, grelos (hojas de nabo) y alubias blancas, a los que se añade carne de cerdo, normalmente lacón, chorizo o morcilla. El resultado es un caldo espeso y sabroso, con un sabor profundo gracias a la mezcla de ingredientes humildes pero de excelente calidad.