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El agua y el transporte público de Barcelona y su área metropolitana se encarecerán en 2018

Pasajeros esperan el metro en Barcelona

elDiario.es Catalunya

Abrir el grifo y usar el transporte público será más caro en Barcelona en 2018. La Agencia Catalana del Agua (ACA) y la Autoridad Metropolitana del Transporte (AMT), entes participados por las distintas administraciones municipales y autonómicas, han aprobado este jueves sendas subidas en estos bienes básicos.

La T-10 de una zona, el título de transporte más utilizado, superará por primera vez en tres años la barrera de los 10 euros. De los 9,95 euros que vale ahora pasará a costar 10,20 euros. La T-mes de una zona, que a día de hoy cuesta 52,75 euros pasará a un precio de 54 euros el año que viene. Y el billete sencillo para hacer un viaje en metro o autobús subirá hasta los 2,20 euros, cinco céntimos más.

El Ayuntamiento de Barcelona ha justificado el incremento por el incumplimiento por parte del Gobierno central de su aportación al transporte público metropolitano. El consistorio reclama al Ejecutivo central que aumente en 40 millones su aportación al transporte de Barcelona.

El agua, más cara

El consejo de administración de la ACA ha decidido aumentar el precio del agua que suministra Aigües Ter-Llobregat (ATLL) a las distribuidoras finales un 11,88%, lo que encarecerá en torno a un euro al mes el recibo del agua, según las estimaciones de la administración.

La tarifa que se aumenta es la de ATLL, es decir, el precio del agua que esta sociedad vende a las suministradoras finales que operan en el área metropolitana de Barcelona o a los municipios. Con el incremento aprobado este jueves, la tarifa de agua en alta queda en 0,8059 euros por metro cúbico. La incidencia de este aumento sobre el recibo del agua de cada familia dependerá de la proporción de agua que compre cada suministradora final a ATLL.

Aigües Ter-Llobregat es la empresa que presta el servicio de abastecimiento de agua “en alta” (desde las cuencas de los ríos hasta los depósitos municipales) a Barcelona y su área metropolitana, por lo que abastece a unos 4,5 millones de personas. En 2012 la Generalitat la privatizó y entregó su gestión a a un consorcio liderado por Acciona, en la que fue la mayor privatización de la historia de la Generalitat y que ha dado lugar a una batalla judicial entre Agbar y Acciona en los últimos años.

En el contrato de concesión, se concretaba una actualización quinquenal de la tarifa, que ha llegado este jueves. Se prevé que el Tribunal Supremo falle el próximo 30 de enero sobre esta adjudicación.

Fuentes del sector consultadas por la agencia Efe han explicado que el precio que supone el agua en el total de la factura aumentará entre un 4 y un 6% en los municipios de Catalunya, y que en el caso de Barcelona el incremento del precio del agua –no del conjunto de la factura– será del 4,1%.

Desde el año 2010 la tarifa del agua de ATLL acumula un incremento del 138,12%, principalmente por la subida que se introdujo en 2012, que fue del 96,99%. El exconseller Josep Rull propuso hace algunos meses amortiguar este incremento de la tarifa del agua de ATLL renunciando a cobrar siete millones del canon concesional, pero la intervención de la Generalitat por parte del Gobierno ha impedido tomar decisiones políticas en los últimos meses.

Una vez constituido el nuevo Govern, según ha indicado la ACA, se estudiarán las posibilidades para cumplir con los compromisos adquiridos en 2017 con el objetivo de minimizar el impacto de los incrementos contractuales.

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