Fira Tàrrega cierra con más espectadores y más participación ciudadana

Fira Tàrrega ha aumentado este año el número de espectadores, especialmente los dos primeros días, así como la cifra de ciudadanos implicados en la creación de montajes participativos, según el director Jordi Durán, que ha anunciado que la participación será el tema de Fira Tarrega 2017.

La feria de teatro de calle de Tàrrega, que empezó el pasado jueves, finaliza hoy con un incremento de las localidades de pago ocupadas, que han pasado de 13.000 el año pasado a 14.450 este año.

Muchos de los espectáculos han agotado las localidades, la zona de acampada ha aumentado ligeramente el número de personas alojadas y “los aparcamientos han estado más llenos que otros años”, según la alcaldesa de Tàrrega, Rosa Maria Perelló.

El director ejecutivo de Fira Tàrrega, Oriol Martí ha subrayado como causas de este incremento el hecho de que “la Diada ha caído en domingo, el aumento de la programación del jueves, la calidad de las propuestas, el buen tiempo y el precio de las entradas”, entre otros factores.

Martí ha recordado que los organizadores no dan nunca cifras totales de público porque “lo importante es la calidad más que la cantidad” y porque “siempre estamos alrededor de 147.000 personas”, pero ha reconocido que este año ha habido más gente el jueves porque se han programado más espectáculos.

El viernes y el sábado han sido días también muy concurridos, favorecidos por el hecho de que este año la Diada se celebra en domingo y no parte por la mitad la Fira, como pasaba otros años.

“Ha sido una gran fiesta de las artes escénicas”, ha asegurado Martí, que ha constatado que “cada año hay menos gente deambulando sin rumbo fijo y más personas que compran con antelación en los espectáculos de pago”.

La alcaldesa ha celebrado la dispersión de espacios escénicos por toda la ciudad, porque “ha ayudado a esponjar el centro”, y el horario de tarde del espectáculo inaugural porque “ha permitido mucha más participación de las familias”.

La interculturalidad ha sido el tema central de la programación de Fira Tàrrega, que arrancó el pasado 8 con “The Colour of Time”, un espectáculo itinerante de la compañía francesa Artonik, y se cierra hoy tras ofrecer 263 sesiones de 57 compañías nacionales e internacionales de teatro, danza, circo y artes visuales.

El director artístico, Jordi Duran, ha destacado la apuesta de la feria de teatro de calle de Tàrrega por la investigación y los nuevos lenguajes escénicos, y ha mencionado el montaje de Maria Capell “Terra Condere”, nacido gracias al Programa de Apoyo a la Creación de Fira Tàrrega.

De la extensa programación de este año cabe subrayar la propuesta del coreógrafo Roberto G. Alonso, que durante todo el fin de semana se ha instalado bajo un puente en las afueras de Tàrrega, donde ha dado a conocer a su personaje, una mujer desahuciada por la sociedad que fantasea con ser una de las heroínas de Tenessee Williams.

Otra propuesta que ha sido muy bien recibida ha sido “El hijo que quiero tener”, de los valencianos El Pont Flotant, que cuanta con la colaboración de actores no profesionales de diferentes generaciones.

Tierna y divertida, la obra habla de los abuelos, de los nietos, de los hijos, de los padres, del esfuerzo que supone educar, de lo que ganan y lo que pierden los que tienen hijos y de la opinión de los que deciden no tener descendencia.

En el apartado de danza, Tàrrega ha ofrecido este año obras de calidad que han tenido una muy cálida acogida del público, como es el caso de “Menar”, de Joan Català, que ha llenado la Plaza Mayor de Tàrrega hasta el límite de su capacidad en todas las funciones.

Los organizadores se han mostrado satisfechos con calidad de los montajes y la recepción del público, “a pesar del riesgo que supone apostar por la investigación”, y han aprovechado la ocasión para valorar muy positivamente el anuncio de la SGAE de incluir un galardón de artes de calle en la próxima edición de los Premios Max.