Has elegido la edición de . Verás las noticias de esta portada en el módulo de ediciones locales de la home de elDiario.es.
La portada de mañana
Acceder
Israel amenaza con una guerra en Líbano
Moreno y Rueda piden que el Gobierno busque mayorías para los Presupuestos
Los problemas que no preocupan a los españoles. Opina Rosa María Artal
Noticia de agencia

Noticia servida automáticamente por la Agencia EFE

Esta información es un teletipo de la Agencia EFE y se publica en nuestra web de manera automática como parte del servicio que nos ofrece esta agencia de noticias. No ha sido editado ni titulado por un periodista de eldiario.es.

Jeff Kinney: Quiero poner en cuestión si cualquier niñez pasada fue mejor

Jeff Kinney: Quiero poner en cuestión si cualquier niñez pasada fue mejor

EFE

Madrid —

0

Para “poner en cuestión” si cualquier tiempo pasado fue mejor, Jeff Kinney, el creador de Greg, el niño más “pringado” de la viñeta actual, lo ha dejado sin Internet ni aparatos electrónicos en la décima entrega de estos diarios de éxito mundial: “Diario de Greg. Vieja escuela”.

“Todas las generaciones piensan que su niñez fue la mejor, yo lo pienso, mi padre también y Greg también; así que me apetecía poner en cuestión esta idea, si eso es así o si es mejor ahora”, cuenta a Efe Kinney (Meryland, Estados Unidos, 1971) durante su estancia en Madrid para promocionar esta obra que ha salido a la venta en 90 países y está traducida a 45 idiomas.

En esta ocasión, la madre de Greg, preocupada por la autoestima de su hijo, propone a la escuela que organice una semana sin aparatos electrónicos. Un plan que el colegio acepta organizando un campamento sin aparatos electrónicos en el que Greg volverá a ser ese “pringado” que hace que los lectores se rían a carcajadas.

Y risas es lo que precisamente “busca” el autor con sus obras (publicadas en España por RBA), porque tras confesar que sus historias “tampoco son excepcionalmente buenas” lo que le interesa “es conseguir el mayor número de carcajadas posibles”. “Mido la calidad de mi obra en cuántas risas consigo”, puntualiza.

En cuanto al tema que propone, si la vida sin internet es posible a día de hoy, Kinney confiesa “no estar seguro” si los niños entenderán o no, aunque sí reconoce que a los más pequeños les debe resultar “dificilísimo vivir sin las nuevas tecnologías y sin aparatos electrónicos”.

Pero a la vez, le parece necesaria acercar esta idea: “Hay un concurso que organiza una biblioteca en Estados Unidos en el que los niños tienen que vivir sin ningún tipo de aparato electrónico durante 24 horas y me parece súper interesante, está muy bien que los niños puedan intentar este reto”.

Por este motivo, por creer en el poder del libro de papel, el creador de este niño de una edad aproximada a los 12 años confiesa que ha abierto una librería en su pueblo (Plainville, Maryland, Estados Unidos).

“Estoy muy interesado en fomentar la lectura de libros de papel en los libros, y no tanto usar pantallas electrónicas. Los libros son una tecnología maravillosa con un diseño genial, son una cosa compacta que contiene mucha información, también se pueden considerar tecnología”, expresa.

En cuanto a Greg, en esta décima entrega sigue sin interactuar con niñas, algo que a Kinney no le preocupa porque su personaje es el fiel reflejo de los niños de su edad.

“Me encantaría -añade- incluir más personajes femeninos, y quiero hacerlo, pero Greg dibuja a las niñas todas iguales y eso es porque para él son todas iguales porque no las entiende, no tiene ni idea de cómo son. Si me fijo en mi hijo, que tiene 13 años, sucede igual. Como yo estoy escribiendo un libro de un niño fiel a una edad concreta, pues es por eso que no hay niñas”.

Asimismo, en cuanto a someter a Greg al crecimiento maduro, Kinney tiene claro que “no” lo hará porque considera que su creación es un “personaje de cómic” y éstos “no cambian ni crecen”.

“Personajes como Harry Potter envejecen, y eso significa que se va perdiendo esa magia de la niñez, y que a medida que va creciendo y abandonando la niñez sus historias se van haciendo menos interesantes. Esto no pasa con los cómics o las viñetas, no están obligados a envejecer ni crecer”, concluye.

Etiquetas
stats