El pueblo de Evo Morales celebra el primer año del museo dedicado a su figura

Los habitantes del pueblo natal de Evo Morales celebraron hoy el primer aniversario del museo dedicado a su figura, con miles de regalos recibidos en su mandato, en una jornada en la que destacaron el carácter indígena de este centro dedicado a su “revolución democrática y cultural”.

Orinoca, un poblado de la región andina de Oruro (oeste), acoge desde hace un año el “Museo de la Revolución Democrática y Cultural” emprendida por el presidente de Bolivia.

Los pobladores, sobre todo escolares de dos colegios de la zona, se congregaron en las puertas del museo para un acto sencillo en el que participaron autoridades locales e indígenas, además del viceministro de Descolonización de Bolivia, Félix Cárdenas.

El tata mayor de Orinoca, Ricardo Cruz, la autoridad local, resaltó el que el pueblo tenga un museo porque antes esas infraestructuras culturales se construían solamente en ciudades.

“Lo lindo que tiene nuestro museo es que atiende a los visitantes en idioma nativo primero y posteriormente se hace una introducción de qué es lo que se ha hablado”, explicó a los periodistas la responsable del museo, Mercedes Bernabé.

Luego los visitantes pueden elegir en qué idioma quieren hacer el recorrido, si en las lenguas indígenas aimara y quechua o en castellano, indicó la funcionaria.

El museo tuvo unos 17.000 visitantes en su primer año de funcionamiento, de los que el 80 % fueron nacionales y el 20 % extranjeros, agregó Bernabé.

Los extranjeros pagan unos diez dólares para ingresar al museo y los locales cerca de dos, mientras que los menores de 18 años pueden hacer los recorridos gratuitamente.

Hasta el momento, el centro cultural generó ingresos por 86.545 bolivianos, unos 12.400 dólares, según datos del Ministerio de Culturas y Turismo de Bolivia.

El centro se construyó en una superficie de 10.814 metros cuadrados con tres módulos que representan a un puma, un quirquincho o armadillo andino y una llama, animales considerados sagrados en las culturas andinas.

El lugar tiene catalogados unos 13.000 objetos que, según Bernabé, “se han ido incrementado poco a poco a medida que el presidente ha recibido algunos regalos”.

“En este año tenemos 2.000 obsequios que él (Morales) nos está entregando”, para que “sean parte de la exposición”, añadió.

Entre los objetos que se exhiben hay fotografías de paisajes bolivianos y de Evo Morales, camisetas y balones que le obsequiaron clubes de fútbol suramericanos y europeos, y una serie de sombreros y gorros típicos de culturas bolivianas.

También está la colección de ponchos tejidos que el mandatario suele recibir cuando llega a una comunidad indígena, así como cuadros del gobernante realizados por varios artistas.

El hecho de que el centro esté dedicado a Morales y se ubique en un lugar remoto de Oruro, al que se llega tras varias horas de viaje por carretera, ha sido criticado por dirigentes opositores.

Las autoridades bolivianas han defendido que el museo no sólo está dedicado al gobernante, sino que también incluye la historia de los pueblos indígenas y sus luchas desde tiempos prehispánicos.