Soria insiste en el compromiso de Volkswagen sobre las inversiones

El ministro de Industria, Energía y Turismo, José Manuel Soria, ha insistido hoy en el compromiso del Grupo Volkswagen sobre las inversiones previstas en España, que rondan los 4.200 millones de euros.

Unos minutos antes de reunirse con las centrales sindicales de Seat y las secretarías sectoriales del Metal de UGT y CCOO, Soria ha explicado, en una entrevista en Telemadrid, que les trasladará el grado de compromiso que asumió el consorcio alemán en la reunión que mantuvieron la semana pasada en Alemania.

“Nos garantizaron literalmente que no había ningún cambio en el programa de inversiones previsto para España, si bien este tipo de decisiones tienen que llevarlas todavía a determinados comités internos del grupo”, ha indicado Soria.

Esto, ha dicho, “hay que verlo como razonable porque, como consecuencia de la situación que se ha creado en el grupo y de la necesidad de dotar de determinadas cantidades, que las han tenido que provisionar, tengan que reducir globalmente los gastos”.

El titular de Industria ha apuntado que en la reunión de hoy expondrá a los sindicatos el objetivo del Gobierno de que se cumplan las inversiones tanto en la planta de Landaben (Navarra), donde se fabrica el Volkswagen Polo, como en Martorell (Barcelona), donde Seat fabrica los modelos León e Ibiza.

También ha resaltado que hay un compromiso del Gobierno y de las comunidades autónomas en las que se encuentran las plantas para apoyar a este grupo automovilístico “con planes de financiación que impulsan la innovación que incorporan estos nuevos modelos”.

En cuanto a si el ministerio va a instar a la Abogacía del Estado a investigar el caso, ha señalado que ha pedido un dictamen sobre si las ayudas del plan PIVE deben de ser devueltas o no.

Soria ha comentado que, teniendo en cuenta que estas ayudas van al consumidor y no al grupo, sería a los consumidores a quienes se tendría que pedir esa devolución, “cosa que el Gobierno ha descartado desde el primer momento”.

Respecto a si hay pánico en el sector, ha dicho que no, que es un caso aislado, pero ha reconocido que sí puede haber “alguna preocupación” en relación a las implicaciones que esto pudiera tener en la industria del motor diesel en Europa.

También ha destacado que los directivos de Seat con los que ha hablado le han negado que tuvieran conocimiento del asunto.