El expresidente dice que con el actual precio del petróleo Spanair se habría recuperado

El expresidente de Spanair Ferran Soriano ha dicho hoy que si la aerolínea hubiera tenido la financiación necesaria, con el actual precio del petróleo y con la mejora del balance, la compañía se habría recuperado y el aeropuerto de Barcelona tendría hoy un “hub” con vuelos intercontinentales.

Soriano ha comparecido hoy, por videoconferencia, ante la comisión de investigación por la quiebra de la aerolínea, y ha asegurado que, si la compañía hubiera estado viva el año pasado, Barcelona hoy tendría un centro de conexiones de vuelos intercontinentales que habría contribuido con 1.300 millones de euros al PIB y unos 11.000 puestos de trabajo.

Ha asegurado que, con el precio actual del barril de petróleo, en torno a los 53 dólares, Spanair “hubiese ganado dinero”.

Soriano ha asegurado que en el momento de la compra de Spanair por parte de un grupo de empresarios e instituciones catalanas, Cataluña “tenía una oportunidad única”, porque Barcelona tenía demanda, disponía de un aeropuerto nuevo, con la T-1, y Spanair era una oportunidad porque se podía comprar por poco y formaba parte de la Star Alliance.

El actual directivo del Manchester City ha dicho que las denuncias de las aerolíneas de bajo coste, entre ellas Vueling, ante la Comisión Europea por ayudas públicas a Spanair fueron determinantes para que el acuerdo para la entrada como socio industrial de Qatar Airways se frustrase, ya que en ese momento estaban redactando los contratos finales con la aerolínea catarí.

“Estuvimos a cinco minutos de alcanzar el objetivo”, ha dicho Soriano, que ha recordado que cuando se rompieron las negociaciones con Catar se retomaron con la aerolínea china HNA, que estaba dispuesta a invertir 150 millones de euros, pero la Generalitat decidió retirar su apoyo a Spanair y ya “no hubo tiempo”, faltaron “un mes o dos más”.

Soriano ha calculado en 180 millones de euros la inversión pública que se hizo en Spanair y ha asegurado que hubiesen hecho falta 100 millones de inversión más para que la compañía siguiera viva, y además ha contrapuesto esta cantidad a los 2.300 millones de euros que el Gobierno ha invertido en Iberia.

El expresidente de Spanair ha asegurado que la misión de la compañía era hacer vuelos intercontinentales para conectar Barcelona con el mundo, para lo que necesitaban un socio industrial y entre 150 y 300 millones de euros.

Ha asegurado que, en el momento de comprar Spanair, tres estudios, uno de Boston Consulting, otro de ALG y otro de Catalana d'Iniciatives, reflejaban que la compañía “podía reflotarse” y que las condiciones objetivas para crear un centro de conexiones de vuelos internacionales en Barcelona existían.

Soriano ha dicho que se reunió con el presidente de la alianza aérea Star Alliance y con el de Lufthansa y ambos tenían mucho interés en un “hub” en el sur de Europa para enlazar vuelos con América Latina.

También ha afirmado que la compañía redactó un plan de viabilidad, un plan estratégico y un plan de negocio, en contra de la acusación de los sindicatos de que los responsables de la aerolínea no les presentaron un plan de viabilidad.

Ha dicho que la aerolínea pasó de 5 a 22 rutas en Barcelona en 2010, a las que se añadieron otras 33 rutas que operaban en código compartido con otras aerolíneas.

Soriano, que no ha querido entrar en valoraciones políticas, ha apuntado que la relación con Aena era la de cliente-proveedor y que, lógicamente, les hubiera gustado que el Estado hubiese hecho más, como hizo con Iberia, pero ha dicho que no puede decir que hubiese presiones políticas: “las únicas presiones que tuvimos fueron las del competidor”, ha señalado.

Asimismo, ha indicado que el 30 de junio de 2011 la empresa tenía 18 millones en caja y que Spanair hasta el último día hacía frente al 93 % de sus pagos cada mes.