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Forcejeo en el centro

José L. Aroca

Ciudadanos está engordando sus expectativas de voto dándole bocados continuos de cocodrilo al electorado centrista del PP, y en la Asamblea de Extremadura entre ambos grupos no hay mucha simpatía, ya que además la única diputada del partido de Albert Rivera, Victoria Domínguez, parece la fuerza que tiene más coincidencias con el grupo socialista de Fernández Vara.

Luis Hernández Carrón, el portavoz popular designado para ser el látigo de la izquierda, no tolera esa cercanía y en el pleno de este jueves ha llamado a Victoria Domínguez “cómplice” por su “silencio”. Después de que Monago haya lanzado que existe un tripartito PSOE-Podemos-C’s, aunque le ha faltado añadir el “todos contra mí”, su portavoz parlamentario Carrón ha dirigido contra la diputada ‘naranja’ una acusación de complicidad por no querer averiguar, según él, qué motivó realmente al Gobex a intervenir en Acorex y Caja Rural.

Pero como Domínguez tiene despacho en la avenida Alfonso VIII de Plasencia, y en la placa de la puerta pone ‘Abogados’ por lo que la palabra le resulta muy familiar por motivos profesionales, la acusación no le hace nada de gracia. “Señor Carrón, cómplice usted, de lo que usted quiera, a ver si…”. Ciudadanos acaba de llegar a la Asamblea de Extremadura, no tiene lazos con el pasado, “así que, términos del Código Penal los deja usted para los tribunales, si le parece”.

En otro momento del pleno Carrón ha insistido en que Domínguez es la “cooperadora necesaria” para apoyar la estrategia “del engaño y la falsedad” que llevaría a cabo el PSOE sobre el estado de las cuentas a su llegada a la Junta.

Comisiones de investigación ha habido muchas en el Parlamento autonómico, pero nadie recuerda ninguna cuyas conclusiones sirvieran para provocar siquiera alguna dimisión. Pasan al olvido y a veces sirven precisamente para difuminar responsabilidades, como aquella que concluyó que de las grandes inundaciones de abril de 2013 en el Guadiana, que anegaron valiosos terrenos agrícolas, no tuvo la culpa nadie, que los desembalses fueron correctos y que si hubo algún responsable era la lluvia, que cayó con exceso la malvada, con lo que pelillos al río en la cuenca con mayor capacidad de regulación de toda España y cuyos responsables, el presidente de la Confederación del Guadiana, y el delegado del Gobierno, se negaron a comparecer en la comisión.

Esta vez al menos se esperan con expectación las comparecencias, si quieren venir, del exconsejero de Economía y Hacienda Antonio Fernández, del antiguo director general de Acorex Javier Donoso o del exdiputado Alejandro Nogales, aunque probablemente si continúa la escalada unos pedirán también la de José Antonio Monago y otros la de Guillermo Fernández Vara.

 

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