Doce civiles de la Minurso han regresado por ahora al Sáhara Occidental

Doce empleados civiles de la misión de la ONU en el Sáhara Occidental (Minurso) han regresado hasta ahora a la zona tras ser expulsados por Marruecos el pasado marzo, dijo hoy Naciones Unidas.

Se trata de los primeros miembros de un grupo de 25 unidades cuyo retorno se debe hacer efectivo “en los próximos días”, según explicó a los periodistas el portavoz Farhan Haq.

La ONU había anunciado ya esta semana un acuerdo con Marruecos para restaurar la “plena funcionalidad” de la Minurso, un proceso en el que el regreso de esos 25 empleados sería el primer paso, según dijo a Efe otro portavoz.

El jefe de las operaciones de paz de la organización, Hervé Ladsous, informó hoy al Consejo de Seguridad sobre ese pacto y sobre la situación actual de la misión en el Sáhara Occidental en una sesión a puerta cerrada, convocada a petición de Venezuela y Uruguay.

Tras el encuentro, el embajador venezolano, Rafael Ramírez, lamentó en declaraciones a los periodistas que el proceso esté siendo “muy lento”.

“Hay un acuerdo con Marruecos de comenzar con 25 personas, pero de esas 25 personas solo van doce. Hay un ritmo muy lento y nosotros estamos seguros de que para el 26, que es cuando vence el plazo dado por el Consejo de Seguridad en la resolución, no va a estar restablecida la Minurso”, señaló.

Esa resolución, aprobada el pasado abril por el Consejo, reclamó la vuelta a la “plena funcionalidad” de la misión y estableció un plazo de 90 días para revisar su situación.

Los quince miembros tienen previsto hacer esa evaluación en una reunión el próximo día 26 de julio, para cuando el Consejo de Seguridad espera contar con “más información” y detalles, según explicó hoy su presidente de turno, el japonés Koro Bessho.

Según Bessho, en la sesión de hoy varios países apuntaron “que lo importante no son los números, sino la plena funcionalidad” de la misión.

En marzo, Rabat expulsó a un total de 73 empleados civiles de la Minurso, que cuenta con hasta 245 uniformados, en su mayoría observadores militares.

La decisión llegó en respuesta a varias declaraciones y gestos del secretario general de Naciones Unidas, Ban Ki-moon, durante una visita a la región, considerados por Marruecos como “hostiles e insultantes”.

El movimiento provocó un fuerte choque diplomático entre el país y la ONU, que defiende que sin ese personal la Minurso no puede desarrollar sus actividades.

La ONU estableció en 1991 la Minurso con el fin de facilitar un referéndum sobre el estatus de la excolonia española, consulta que por ahora no se ha llevado a cabo.

Marruecos presentó una propuesta de autonomía para la zona en 2007 y considera que esa debe ser la base de la negociación, mientras que el Frente Polisario insiste en la necesidad de convocar cuanto antes ese referéndum.