La ley de la marihuana en Uruguay no se verá afectada por advertencias de la ONU

El proyecto de regulación de la compraventa y cultivo de marihuana en Uruguay “no se verá afectado” por la advertencia de la ONU, que señaló que la ley violaría el tratado internacional sobre estupefacientes, afirmaron hoy fuentes legislativas.

El senador oficialista Luis Gallo, vicepresidente de la Comisión de Salud Pública del Senado uruguayo, que en estos días debate el proyecto de ley sobre el cannabis impulsado por el Gobierno del presidente José Mujica, dijo a Efe que la advertencia de Naciones Unidas “no tendrá ninguna influencia”.

El órgano de la ONU que vigila el cumplimiento de los convenios internacionales sobre drogas advirtió ayer a Uruguay de que el proyecto de ley viola los tratados internacionales suscritos por el país, en concreto la Convención Única de 1961 sobre Estupefacientes.

Un total de 186 países, incluido Uruguay“, han adoptado la Convención, recordó en un comunicado Raymond Yans, presidente de la Junta Internacional de Fiscalización de Estupefacientes (JIFE).

Gallo, médico de profesión y miembro de la gobernante coalición de izquierda Frente Amplio, recordó “en otras naciones, como en Estados Unidos, 22 estados han regulado el uso terapéutico de la marihuana y en Colorado y Washington también su uso recreativo, sin más repercusiones internacionales y sin sanciones de la ONU”.

El senador argumentó que las convenciones internacionales sobre drogas “deben actualizarse para dar respuesta a las realidades presentes”, en las que “se demuestra que los anteriores criterios prohibicionistas han ido fracasando”.

Por ello, consideró “necesario” que la ONU “saque al cannabis de la lista de grado uno de estupefacientes sujetos a fiscalización internacional”, y lo separe de otras sustancias que figuran en el mismo listado, como la cocaína, la heroína o las drogas de síntesis.

En opinión de Gallo, ese sería el paso previo para “avanzar en su regulación y normativización”.

En todo caso, el parlamentario descartó que Uruguay tome “acciones unilaterales” contra la Convención sobre Estupefacientes de la ONU, como ocurrió en el caso de Bolivia, que en 2012 solicitó una excepción a dicho convenio que le permitiese despenalizar el mascado de coca, tradición indígena protegida por la Constitución.

Por su parte, el senador opositor Alfredo Solari, del Partido Colorado, médico y presidente de la Comisión de Salud del Senado, mostró a Efe su “preocupación” por el hecho de que “un país pequeño como Uruguay comience a incumplir tratados internacionales”.

“El mecanismo de defensa de un país pequeño frente a las agresiones externas son las instituciones internacionales. Si ahora el Gobierno uruguayo incumple voluntariamente los tratados internacionales, las repercusiones políticas pueden dejar al país desprotegido”, razonó Solari.

El proyecto impulsado por el presidente Mujica, legaliza la compraventa y el cultivo de marihuana y establece la creación de un ente estatal regulador que se encargaría de emitir licencias y controlar la producción y la distribución de la droga.

El proyecto ya fue aprobado por la Cámara de Diputados donde, al igual que en el Senado, el oficialismo tiene mayoría.

Tras una nueva reunión de la Comisión de Salud del Senado celebrada el martes, ya se han votado diez de los 44 artículos del proyecto, indicó Solari.

Una vez que finalice el análisis de la comisión la iniciativa será puesta a consideración del pleno de la Cámara.