El temporal bate récord en oleajes y deja un muerto y tres desaparecidos

El fuerte temporal que sacudió la costa gallega el pasado día de Reyes ha batido el récord “histórico” de oleaje, con una altura 11,5 metros, y ha dejado un muerto y tres personas desaparecidas en las localidades coruñesas de Valdoviño y Corrubedo.

La boya de Cabo Silleiro (Pontevedra) registró el día 6 una altura significante de oleaje (la media del tercio de las olas más altas) de 11,5 metros, el máximo histórico en los últimos quince años, ha informado Puertos del Estado en un comunicado.

Esta entidad del Ministerio de Fomento ha explicado que su sistema de medición del estado de la mar también detectó olas individuales de hasta 20 metros de altura, “el equivalente a un edificio de siete plantas”.

Este virulento oleaje, que activó el lunes la alerta roja en las provincias gallegas de Pontevedra y A Coruña, provocó un golpe de mar que arrastró a tres personas de la misma familia, dos de ellas todavía desaparecidas, en Valdoviño.

Ayer de madrugada, la Guardia Civil halló el cuerpo sin vida de Rodrigo Pena (67 años) en la playa de A Frouxeira y hoy, Salvamento Marítimo ha retomado la búsqueda por mar, aire y tierra de los dos desaparecidos, Juan Carlos Bedoya López (50 años) y su hija Patricia Bedoya (25 años).

La familia se encontraba el día de Reyes en un acantilado en la costa de Meirás arrojando al mar las cenizas de otro familiar, cuando una gran ola los arrastró.

El operativo está integrado por una aeronave (Helimer 209), la Salvamar 'Shaula' y decenas de efectivos que rastrean los acantilados y playas a lo largo de unos 12 kilómetros de costa hacia el norte, entre A Frouxeira y Punta Candieira, en Cedeira.

Además, en Corrubedo (A Coruña), Protección Civil y vecinos de la parroquia buscan a un pescador de 70 años que lleva desaparecido desde el viernes.

El temporal generó una situación de “fuerte agitación” en los puertos atlánticos lo que ha provocado también cuantiosos daños materiales en las localidades coruñesas de Muxía y Laxe.

En el País Vasco, el fuerte oleaje hundió varias pequeñas embarcaciones y ocasionó deterioros en inmuebles públicos y privados en Elantxobe y Bermeo (Bizkaia).

Aunque no se preveía un fuerte impacto del oleaje, al coincidir con mareas vivas hubo un nivel del mar “elevado” por lo que las olas penetraron en tierra “más eficazmente”, ha explicado Puertos del Estado.

Las condiciones meteorológicas han mejorado “sensiblemente” en las últimas horas, pero en la costa gallega todavía siguen activados los avisos costeros naranjas (riesgo importante) por oleaje, con previsión de lluvia y viento.

El frente estacionario que ha provocado el temporal se está deshaciendo, y viento, lluvia y oleaje han amainado en los litorales gallego y cantábrico, según la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet).

Por lo que, según la previsión, a partir de mañana jueves y hasta el domingo, la Península estará libre de frentes y borrascas.