El Congreso pide incluir la sensibilidad química en la clasificación de enfermedades

La Comisión de Sanidad y Servicios Sociales del Congreso ha instado hoy al Gobierno a promover las actuaciones necesarias para incluir la sensibilidad química múltiple en la próxima actualización de la Clasificación Internacional de Enfermedades.

Lo ha hecho con la aprobación, por unanimidad, de una proposición no de ley del PP, que reclama al Ejecutivo que haga lo necesario para que este síndrome sea considerada una dolencia física “siguiendo como ejemplo fórmulas aplicadas en países como Alemania, Austria o Japón”.

Según ha explicado la diputada del PP Carmen Quintanilla este síndrome, provocado por una respuesta fisiológica frente a multitud de agentes y compuestos químicos que se pueden encontrar en el medio ambiente, afecta en España a entre el 0,5 y al uno por ciento de la población,

A su juicio, la inclusión en la Clasificación Internacional de Enfermedades permitiría a sus afectados disfrutar de los derechos básicos en materia de salud, asistencia y demás derechos derivados reconocidos por la Declaración Universal de los Derechos Humanos.

Igualmente, la Comisión ha dado luz verde a otra propuesta del grupo popular por la que emplaza al Gobierno a estudiar los posibles efectos nocivos de los ambientadores para “mejorar y precisar” la regulación de este tipo de productos y, posteriormente, impulsar la retirada de aquellos que produzcan emisiones tóxicas perjudiciales para la salud.

La Comisión, asimismo, ha aprobado otra propuesta del PP para que se mantenga la condición de familia numerosa hasta que el último de los hijos alcance el límite de edad establecido.

Esta medida ya está incluida en el anteproyecto de protección a la infancia, aprobado por el Ejecutivo el pasado 25 de abril.

La ministra de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad, Ana Mato, anunció entonces la modificación de la ley de protección de familias numerosas con el objetivo de que lo sigan siendo hasta que el hijo menor cumpla 21 años o 26 en caso de que esté estudiando.

Durante la comisión, también ha salido adelante la proposición no de ley del grupo catalán para que el Ejecutivo regule la sustitución e intercambiabilidad de los medicamentos biosimilares, productos biofarmacéuticos que se fabrican a partir de organismos vivos utilizando la biotecnología.

En concreto, la iniciativa aprobada insta al Gobierno a actualizar y clarificar la regulación específica en esta materia “en la línea de los que está establecido en la UE”.

La diputada de CiU Concepció Tarruella ha insistido en la diferencia entre los medicamentos biosimilares respecto a los genéricos,“pues no son intercambiables y no tienen el principio activo”.