El Gobierno ha rechazado las alegaciones interpuestas por Azata del Sol al expediente de expropiación de los terrenos donde se levanta el hotel El Algarrobico, y se mantiene así firme en su intención de expropiar y ocupar los terrenos incluidos en la servidumbre en el dominio público del paraje en Carboneras (Almería). El objetivo final es derribar el inmueble.
En una reciente resolución, el delegado de Gobierno en Andalucía, Pedro Fernández, acuerda aprobar con carácter “definitivo” la expropiación de los 16.432 metros cuadrados de “suelo no urbanizable” en los que se asienta la parte del edificio que invade el dominio público marítimo-terrestre como bien a ocupar en la expropiación forzosa.
El acuerdo, sobre el que cabe recurso de alzada, supone la expropiación de solo una parte de los 32.654 metros que ocupa toda la superficie del hotel enclavado en el sector ST-1, cuya otra mitad se adentra en el espacio protegido del Parque Natural de Cabo de Gata-Níjar sobre el que es competente la Junta de Andalucía.
El Gobierno andaluz rechaza acudir a la vía expropiatoria como método para propiciar la demolición del inmueble e insiste en la necesidad de anular la licencia de obras concedida por el Ayuntamiento de Carboneras en 2003; una cuestión que depende del Consistorio y sobre la que la propia Junta pidió al TSJA que declarara un plazo “final y perentorio” para que ejecutar la sentencia que ordena la revisión de ese permiso municipal.
Gobierno central y Junta de Andalucía discrepan abiertamente sobre cuál es la mejor fórmula para acabar con la mole, que sigue en el mismo estado en el que quedó tras ser paralizada por orden de un juez en el año 2006, favorecida por una maraña legal y por la incapacidad de la justicia para lograr que las sentencias que afectan al inmueble se ejecuten.
Nuevo informe de la Abogacía del Estado
A través de la resolución, el delegado de Gobierno en Andalucía apunta que, con lo actuado hasta la fecha, queda “demostrada” la necesidad de ocupar la parte de la construcción que invade la zona de servidumbre, esto es, los cien metros de anchura en el tramo litoral, para así poder proceder a la expropiación forzosa que se fijó en el plazo de cinco meses desde febrero.
Azata del Sol alegó el pasado 12 de mayo al procedimiento de expropiación de cara a intentar anular el procedimiento al entender, entre otras cuestiones, que los terrenos a expropiarse no estaban bien delimitados y no se reflejaban todos los datos en relación al inmueble. La propia promotora llegó a aportar un informe pericial para tratar de evidenciar la “incorrecta” descripción.También cuestionaba que el procedimiento reuniera las suficientes garantías legales al tiempo que contemplaba cierta falta de justificación a la hora de expropiar los terrenos.
Frente a ello, la Abogacía del Estado elaboró un nuevo informe preceptivo a partir de un documento técnico encargado a los servicios técnicos de la Dirección General de la Costa y del Mar para respaldar la necesidad de ocupación esgrimido para validar el proceso. El Gobierno defiende que los suelos están correctamente identificados en el expediente al delimitarse tanto su ubicación como la parte afectada por la Ley de Costas. Esa zona protegida está ocupada por gran parte del hotel de 411 habitaciones y una veintena de plantas a medio construir.
Así, defiende la imposibilidad de mantener el inmueble en el lugar en el que se encuentra al tratar se de un suelo declarado no urbanizable y que, además, ha sido declarado judicialmente como espacio natural protegido, más allá de que el permiso por el que se autorizó la construcción no haya sido aún anulado.
El uso y destino del hotel es “incompatible” tanto “con la zona de servidumbre de protección” como en su “inclusión en el área del Plan de Ordenación de Recursos Naturales (PORN)” de Cabo de Gata, defiende el Gobierno, que en su resolución insta a Azata del Sol a proponer un precio que propicie la adquisición “por mutuo acuerdo” del edificio, formule la respectiva hoja de aprecio y haga una propuesta mediante la que fijar los criterios de valoración.
La ministra Aagesen espera culminar la expropiación “a lo largo de este año”
A preguntas de los periodistas en Sevilla, la ministra para la Transición Ecológica, Sara Aagesen, ha manifestado que el Gobierno confía en que el proceso expropiatorio pueda culminar “a lo largo de este año” y se pueda actuar en la zona sobre la parte del hotel en la que el Gobierno tiene capacidad, tal y como defiende.
La ministra considera que el Ejecutivo podrá seguir adelante en el proceso más allá de que Azata del Sol interpusiera un recurso contencioso-administrativo sobre el acuerdo del Consejo de Ministros del pasado mes de febrero por el que se iniciaban los trámites para declarar de utilidad pública la actuación.
En este sentido, el Gobierno defiende su legitimidad para efectuar la expropiación a través de este acuerdo que, según sostiene la Abogacía del Estado, es “plenamente ejecutivo” puesto que “no consta la petición de suspensión de dicho acuerdo” por parte de la promotora del hotel.
María Jesús Montero, vicepresidenta, se comprometió a “derribar” la parte sobre dominio público de El Algarrobico a lo largo de 2025.