Miguel Gracia: “La legislación se dicta desde las grandes ciudades y no da respuesta a las demandas de los pueblos”

El presidente de la Diputación Provincial de Huesca (DPH), Miguel Gracia, participó este viernes en una visita a los equipamientos que mejoran la calidad del agua de Zaidín. Repasó la realidad de la situación que atraviesa la administración local, que “tiene que dar respuesta a las necesidades de las personas que viven en el medio rural, pese a contar con una legislación y normativa que se dicta desde las grandes ciudades y no da respuesta a las demandas del día a día de los pueblos”.

En este sentido, se ha referido a la normativa de la PAC, que “en zonas como esta ha de servir para generar oportunidades”.

También habló sobre cuestiones concretas como la nueva normativa en contratación pública, “que condiciona y limita las posibilidades de la administración local o la exigencia de desarrollar una administración electrónica sin tener en muchas ocasiones los medios técnicos y humanos suficientes”. Incluso, afirmó, “ni nos dejan invertir el dinero que tenemos disponible por condicionantes legislativos que nos obligan a dejar el dinero en los bancos”.

400.000 euros de inversión

Las obras realizadas en Zaidín han supuesto una inversión de más de 400.000 euros, de los cuales el 50 % ha sido financiado por la DPH, y sirven, explican desde la institución provincial, “para mejoran la captación, almacenaje y tratamiento de agua potable de la localidad”.

La primera actuación que se llevó a cabo durante 2017 es el depósito para almacenar agua potabilizada, una infraestructura que permite a la localidad entre 2 y 8 días de autonomía en el suministro de agua, dependiendo de la estación del año, y que además evita episodios de turbidez en el agua de boca.

Tiene una capacidad de 1.200.000 litros y en su construcción se invirtieron 259.000 euros. En este depósito se almacena agua potabilizada antes de verterla a la red de abastecimiento de agua potable de la localidad. Zaidín carecía de este tipo de infraestructuras.

Posteriormente, se remodeló la estación de tratamiento de agua potable con una inversión de más de 160.000 euros, “que ha permitido reforzar la del depósito de almacenaje”. La obra ha consistido en instalar dos nuevos filtros con sus respectivas bombas de limpieza y un grupo de presión para las piscinas municipales próximas a esta estación, una sala específica para almacenar productos químicos y el sistema de automatización de telegestión y telecontrol.

La nueva planta tiene una capacidad máxima de tratamiento de 1.000 metros cúbicos por día que permiten hacer frente a mayor población de la actual.