Felipe VI afirma que “la solución a los problemas llega de la unidad, nunca de la división” y pide “voluntad integradora”

Hacía años que el discurso del rey, Felipe VI, no tenía tanta carga política como la del que ha pronunciado esta tarde en la 43 edición de los Premios Princesa de Asturias. El monarca ha apelado al sentido de la responsabilidad para lograr democracias fuertes a través de “la unión, la colaboración y el compromiso de todos”. “Son muchos los problemas y las soluciones llegarán como siempre ha sucedido y demuestra la historia de España de la unidad, nunca de la división”, ha afirmado.

Felipe VI ha iniciado su intervención con un elogio a los galardonados por su “significado, impacto y la contribución” a un mundo “más justo, también más sabio y lúcido”. A continuación ha lamentado que la esperanza de que el comienzo del siglo XXI permitiera vivir en un mundo “más pacífico, más estable y más ordenado” se haya frustrado debido a los conflictos bélicos “en su versión más descarnada y brutal” así como del vértigo ante el riesgo de su extensión.

Tras elogiar la aportación de los premiados para un mundo mejor, el monarca ha agradecido que nos acerquen al mundo que “tanto necesitamos y anhelamos, hecho de voluntad de hacer el bien, de personas que son un baluarte de valores cívicos y morales, y que cada día -ha añadido- trabajan para ayudar a resolver algunos de los problemas más graves de la Humanidad”.

En un momento en el que el conflicto Israelí - Palestino vuelve a copar toda la actualidad mundial, Felipe VI, que ha calificado lo que está pasando como un “sufrimiento desgarrador”, ha recordado el Premio de la Concordia concedido por la Fundación en 1994 conjuntamente al primer ministro de Israel, Isaac Rabin, y al presidente de la Autoridad Nacional Palestina, Yaser Arafat.

“Se debió a su decisivo esfuerzo para crear las condiciones de paz en la región, siguiendo el proceso iniciado en la Conferencia de Madrid de octubre de 1991 que debe conducir a la pacificación definitiva del Próximo Oriente”, ha rememorado, “una paz que debe nutrirse, sustentarse y defenderse, como destacó un año después el Rey Hussein de Jordania al recibir el premio de la Concordia. Porque es la única manera de garantizar un futuro mejor, un futuro seguro para toda la Humanidad”, ha reivindicado Felipe VI.

El rey ha advertido que la sombra de los conflictos internacionales se extienden “sobre las democracias, principios y valores que inspiran y garantizan nuestra convivencia”. Y ha recordado que no se debe caer en “la pasividad” y hay que tener “el mayor sentido de la responsabilidad” para afrontar “los desafíos que nos tocan”.

“Tenemos que ser muy conscientes de lo que hemos alcanzado como Nación”, ha dicho el monarca, y de conservarlo y preservarlo de lo que pueda erosionarlo“. ”Son muchos los problemas y la soluciones llegarán como demuestra la historia de España de la unidad“, ha alegado.

“Si queremos construir algo que transcienda y tenga sentido”, ha finalizado, “es con la unión, con el esfuerzo colectivo y las actitudes solidarias como se construyen las grandes obras”. “Así surgen las respuestas que realmente nos permiten avanzar”, ha afirmado.