El Canarias quiere darle una alegría a su afición
El Iberostar Tenerife recibe este domingo (12.30 horas) al Bilbao Basket en su último encuentro de la temporada en el Santiago Martín, un choque en el que tanto su técnico como su plantilla quieren concluirla con un triunfo que les permita aspirar a la undécima plaza, objetivo que también busca su rival.
De resto, ninguno de los dos equipos se juega nada en este envite ya que se encuentran en la zona media de la clasificación sin opciones a luchar por estar entre los ocho primeros, pero también sin problemas con los puestos de abajo.
Eso sí, los dos conjuntos quieren terminar lo más arriba posible y en estas dos jornadas quieren alcanzar su mejor clasificación.
Será el conjunto tinerfeño el que salga como favorito, pero además con una motivación extra, ya que espera despedirse de la temporada ante su gente con un triunfo y así olvidar esas malas jornadas que los seguidores han tenido que sufrir.
Ya el pasado jueves ante el Valencia Basket se vio a un Iberostar Tenerife mucho mejor, acertado en ataque y con ganas de agradar a su gente. perdieron ante los de Velimir Perasovic, pero consiguieron demostrar que su recuperación es un hecho, aunque haya llegado un poco tarde.
El técnico, Alejandro Martínez, podrá disponer de la totalidad de su plantilla, a excepción de Juan Pedro Gutiérrez, pero si con un equipo que le pondrá garra y que buscará ese triunfo como si de una final se tratara.
Enfrente tendrá un equipo duro, con jugadores con experiencia y que, pese al haber tenido una temporada bastante movida, han dejado clara su profesionalidad y se han situado en una zona importante en la clasificación.
Garmán Gabriel, Raúl López, Álex Hervelle, Markota, Mumbrú son algunos de sus hombres importantes en el equipo, jugadores que han dado la cara ante situaciones complicadas y que no dejarán de hacerlo en las dos jornadas que quedan para finalizar la Liga.
El Iberostar Tenerife, para ganar al Bilbao tendrá que jugar al mismo nivel ofensivo que ante el Valencia y apretar algo más atrás para impedir que el rival, con grandes talentos ofensivos, pueda hacer mucho más daño del que ya suele hacer.