Empieza el maratón de partidos para el CD Tenerife

El CD Tenerife afronta este viernes (18.30 horas, Fuenlabrada) el regreso de la competición con el reto de dar continuidad a la dinámica en la que se encontraba cuando llegó el parón, que le había llevado a ser el segundo mejor equipo de la categoría en las diez primeras jornadas que se habían disputado de la segunda vuelta.

Más de 20.000 kilómetros durante las próximas cinco semanas esperan al plantel de Rubén Baraja, que a la acumulación de partidos deberá sumar la condición de insularidad.

A pesar de los buenos números del conjunto chicharrero en el último tramo de competición disputado, los blanquiazules tienen más cerca los puestos de descenso (4 puntos) que la zona de promoción (7 puntos), por lo que el mensaje que proyecta el vestuario es que el principal objetivo es amarrar la permanencia lo antes posible.

El nuevo director deportivo de la entidad, Juan Carlos Cordero, centró sus esfuerzos en conseguir que los jugadores llegasen a este tramo de competición con su futuro resuelto, para que estuviesen centrados completamente en la competición.

De esta forma, durante los últimos meses ha cerrado las renovaciones de Aitor Sanz, Suso Santana, Carlos Ruiz, Dani Hernández, Shaq Moore, Nikola Sipcic, Alberto Jiménez, Elliot Gómez o Jorge Padilla, mientras que se llegó a un acuerdo con Luis Pérez, que tenía firmado hasta final de junio y que no va a seguir en la isla, para prorrogar su contrato hasta que termine la temporada.

Una de las principales decisiones que tiene que tomar Rubén Baraja en esta reanudación de la competición es la del sustituto en la medular del sancionado Aitor Sanz, por lo que tanto Javi Muñoz, Iker Undabarrena o Javi Alonso aspiran a acompañar a Luis Milla, que regresa a la que fue su casa y donde es muy querido, en el centro del campo.

En cuanto al rival, el parón del fútbol por la pandemia del coronavirus retrasó tres meses el estreno en el banquillo del Fuenlabrada de José Ramón Sandoval, que se juega de inicio ganar tranquilidad en la clasificación o meterse de lleno en la pelea por la salvación, ante un rival en dinámica opuesta como el Tenerife, pero empatados a puntos.