Pérdida de confianza
Una semana más el cuadro grancanario dejó una pobre imagen en la pista, a pesar de haber comenzado con buen pie. Los pupilos de Pedro Martínez apenas aguantaron quince minutos en el choque, hasta que los locales pusieron tierra de por medio con un parcial de 14-0.
Apenas 53 puntos, con menos de quince puntos por cuartos, que hacen imposible ganar ningún encuentro en la Liga Endesa. Tras la Copa del Rey el cuadro isleño sigue sin encontrarse a si mismo, ahondando una crisis que puede poner en peligro la clasificación para el playoff.
La ausencia de un trabajo colectivo y la solidaridad habitual en la defensa grancanaria ponen en entredicho al vestuario, que no consigue encontrar las regularidad. Nelson se mantiene como el MVP (jugador más valorado), pero sus aportaciones llegan en los minutos de la basura, cuando la remontada ya es imposible.
Los amarillos volvieron a a aferrarse a su inmejorable inicio anotador desde el triple, repartiéndose Toolson y Nelson el trabajo ofensivo, aunque en el bando aragonés, Roll y Aguilar hacían lo propio. El bajo tanteador, (17-18 en el primer cuarto) era fruto del gran trabajo defensivo de ambos equipos, segundo y tercero en la lista de las mejores defensas de la liga.
Ante la baja de Scheyer, Pedro Martínez dio la oportunidad a Óscar Alvarado, que tras varios partidos sin participar saltó con muchas ganas a la pista contagiando a sus compañeros. Dos asistencias del canterano lanzaron al Herbalife Gran Canaria en el marcador, logrando la primera ventaja seria del choque, 19-25, que Norel y Aguilar no tardaron en contrarrestar la renta aprovechando la habitual pájara anotadora de los canarios.
Pedro Martínez, inerte en el banquillo, solicitó un tiempo muerto inútil, al no mover ninguna de las fichas que mejorasen el juego, sumiendo al equipo en una vorágine negativa que tocó techo con un parcial de 14-0. Nelson, inédito desde sus dos triples en el primer cuarto, fue el encargado de cortar la racha, rebajando la ventaja para que el CAI Zaragoza no rompiese el choque.
Los grancanarios no consiguieron mejorar sus porcentajes, aumentando sin control el número de balones perdidos y entregando poco a poco el choque a los locales. Con apenas una decena de puntos por cuarto, los grancanarios tenían muy complicado superar a la defensa del CAI.
Aguilar y Roll se encargaron de ampliar la renta paulatinamente, viendo como la reacción grancanaria no llegaba. Nelson maquilló sus números en los últimos minutos, al igual que Toolson, acabando ambos como máximos anotadores de los amarillos con 14 puntos, pero con una losa de 20 perdidas que hacia imposible levantar el marcador.
En el último cuarto la afición local se divirtió con el juego de su equipo, que a punto estuvo de conseguir superar en el básquet average a los canarios, aunque consiguieron mantener la ventaja en el duelo personal, única noticia positiva de la visita a Zaragoza.