“El Rosario Solar demuestra que otro modelo energético es posible: más justo, más limpio y hecho por y para la gente”

Fidel Vázquez, teniente de alcalde y concejal de Transición Ecológica del municipio tinerfeño de El Rosario, explica el funcionamiento de El Rosario Solar, un proyecto pionero en Canarias que abastece con energía limpia a más de 150 hogares y negocios de la localidad.

¿Qué es exactamente El Rosario Solar y cómo surge esta iniciativa?

El Rosario Solar es una comunidad energética local, impulsada por vecinos, pequeñas empresas y el propio Ayuntamiento, con un objetivo claro: producir, almacenar y consumir energía renovable dentro del municipio. Nació de la voluntad de demostrar que la transición energética no es algo lejano o teórico, sino una realidad que podemos construir desde lo local, con participación ciudadana y beneficios compartidos.

¿Qué balance hacen en este primer año de funcionamiento?

Muy positivo. Más de 150 hogares, pymes y comercios ya se abastecen de energía limpia, generada en el Polígono de La Campana. En solo un año hemos demostrado que otro modelo energético es posible: más justo, más limpio y hecho por y para la gente de El Rosario. Además, el ahorro económico y la estabilidad frente a las fluctuaciones del mercado eléctrico están siendo notables.

¿Cómo funciona técnicamente la comunidad? ¿Es necesario tener placas solares en casa?

No, y ese es uno de los grandes atractivos del modelo. Contamos con una instalación fotovoltaica de 2 MW de potencia y 1 MWh de baterías, ubicada en las cubiertas del Polígono de La Campana. Desde allí se suministra energía a viviendas y negocios en un radio de dos kilómetros. Los participantes reciben la energía limpia como si tuvieran su propia instalación, pero sin obras ni inversiones individuales. Todo se gestiona de manera colectiva: la producción, el almacenamiento, el mantenimiento y los beneficios.

Además del ahorro económico, ¿qué otros impactos está teniendo el proyecto?

El impacto va mucho más allá de la factura. Estamos reduciendo emisiones de CO₂, creando empleo local en instalación y mantenimiento, dinamizando talleres y proveedores del municipio y fomentando la formación en eficiencia energética. Cada kilovatio generado aquí refuerza la economía verde y la cohesión social de El Rosario.

¿Qué papel ha jugado el apoyo institucional en este proyecto?

Fundamental. Hemos contado con más de seis millones de euros de la Consejería de Transición Ecológica del Gobierno de Canarias, financiados con fondos NextGenerationEU del Plan de Recuperación. Gracias a eso, los costes de participación se han reducido a la mitad respecto a una instalación convencional. Además, el Ayuntamiento aplica una bonificación del IBI del 50% durante diez años para viviendas y del 25% para empresas industriales y comerciales.

¿Cómo puede sumarse un vecino o una pyme a El Rosario Solar?

Es muy sencillo. Cualquier persona o empresa dentro del área de cobertura puede asociarse, incluso si no dispone de tejado propio. La comunidad se encarga de todo: la gestión técnica, el seguimiento del consumo y el acompañamiento en el alta. Solo hay que entrar en www.elrosariosolar.com para informarse o enviar la solicitud.

¿Cuáles son los próximos pasos de la comunidad energética?

Queremos llegar a 500 participantes y seguir ampliando la capacidad de generación. Pero, sobre todo, queremos consolidar este modelo ciudadano y replicarlo en otros municipios. La energía debe dejar de ser un bien especulativo para convertirse en un bien común. Cuando la energía se comparte, gana la sociedad entera.

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