Sobre este blog

Espacio de opinión de Canarias Ahora

Pesadilla por Navidad

0

Después de un enclaustramiento voluntario, sin más necesidad que ver los documentales de la dos, que siempre me deleitan después de almorzar con la imagen del león devorando a la indefensa gacelilla inexperta, que a pesar de su mimetismo con el entorno y su quietud, apenas sin respirar, no le sirvió de nada; me decido a escribir, en un vano intento de comprender la estrategia acosadora de los depredadores aunque esté escrita en sus genomas, y sabiendo que inexorablemente ,tarde o temprano darán con sus víctimas..

El sonido de unos petardos y unos güasaps me despertaron del largo letargo majorero, allí el tiempo pasa de otra manera, y me recordaron que por estas fechas la gente se felicita, se desea parabienes y se habla sin esfuerzo dialéctico alguno de solidaridad, de paz, de familia, de unidad, de amor?en definitiva, de deseos. ¡Carajo es Navidad! ¡Qué bien! se acabó la crisis provocada y sus daños colaterales, los leones descansan y los herbívoros pueden pastar tranquilos, con suerte esperarán hasta después de los reyes (magos) para empezar a devorar de nuevo.

Todo tiene su lógica: cualquier nicho ecológico necesita a los depredadores, porque de lo contrario sería una arcadia feliz. Sin control, el resto de los seres vivos acabaría con los recursos naturales del planeta en una orgía Dionisiaca. Alguien tiene que poner orden en la naturaleza de un mundo sin dios, ¿quién mejor que un depredador que selecciona sabiamente a sus víctimas?: las más débiles, las más jóvenes, las más viejas, las enfermas?al resto, se les acota el terreno para controlarlas mejor y tenerlas al alcance del colmillo cuando ya no cumplan con su función.

Cualquier paralelismo entre el liberalismo salvaje y la ley de la selva es pura casualidad. El darvinismo social es otra cosa, quién diga lo contrario miente o le ocurre como al león de la dos, que cree tener razón cuando confunde el hambre con las ganas de comer. Así las cosas, y por la misma razón que da el sentido común, los derechos de las personas y el desarrollo de una sociedad cohesionada y justa, no se puede dejar ésta en manos de los leones, ni de los tiburones, ni de los carroñeros que se alimentan de sus despojos, porque siempre tendrán hambre, su insaciabilidad terminará rompiendo el equilibrio social; y la capacidad de adaptación humana, hará que consigan justamente lo contrario de lo que persiguen. Al tiempo.

Sobre este blog

Espacio de opinión de Canarias Ahora

Etiquetas
stats