La tormenta portuaria por EDITORIAL

El Puerto de La Luz y de Las Palmas es puerto de interés general, inserto en el sistema portuario español, cuyas competencias sustantivas recaen en Puertos del Estado, ente que debe definir el papel de nuestro puerto en el sistema español atendiendo a los intereses públicos de los españoles.

Otra cosa es que los puertos de interés general están dotados de autonomía y, además, que al presidente lo nombra, como a otros consejeros, el Gobierno de Canarias por mor de una ley chapuza que hizo un Gobierno de Aznar ante la presión de Jordi Pujol.

Por ello cuando un presidente como José Manuel Arnaiz, nombrado por un Gobierno similar al actual, de Coalición Canaria y el Partido Popular, se ibarrechizó, fué imputado, como actualmente lo está, por desobediencia.

Por ello la actitud del Partido Popular de poner el piñon fijo para visualizar quién manda en este puerto es un abuso de Ley y un comportamiento irresponsable en el orden institucional. A los canarios nos interesa que se gestione la Autoridad Portuaria de Las Palmas conforme a las directrices del ente sustantivo responsable, que no es otro que Puertos del Estado, gobierne en Madrid el Partido Popular o el Partido Socialista.

No preveía la Ley mencionada que en Canarias, de hecho este caso no se repite en ningún otro sitio de la geografía peninsular, hubiera un Gobierno autonómico tan insensato, sobreactuando sin rubor como le gusta hacer al señor Soria, que por ello ya fue castigado por las urnas, hasta producir un enfrentamiento total con la Administración central.

Y por ello, de la primera parte del sainete ha resultado una representación empresarial entreguista e irresponsable, que sabiendo esto, cede a la avaricia del Gobierno de Canarias.

Sólo el empresario Félix Santiago y el director del Puerto, José Miguel Pintado, han puesto por delante otra cosa, la razón y los intereses generales. Por ello, no estarán en el Consejo de Admistración.

Porque resulta lógico y hasta necesario que ante el caos sin precedentes en toda España que instaló Arnaiz, Puertos del Estado se resista a que el mismo dedo, el del señor Soria, vuelva repetir hazaña y enterrar definitivamente a estos puertos canarios dependientes de la Autoridad Portuaria de Las Palmas.

Todo lo anteriormete dicho condena a ese grupo de comandantes del Partido Socialista, que reunidos de forma recurrente en Casa Brito, que no el restaurante de Arucas, sino la casa de un consejero con ese nombre, no han podido evitar cierto olor a conspiración partidista que no es nada compatible con los intereses públicos que estamos invocando.

Porque si de intereses públicos se tratrara, el señor Paulino Rivero, con o sin el permiso de Soria, hubiera propuesto a alguien competente, conocedor del trabajo a realizar, acaso independiente y aceptado por Puertos del Estado. Tendrían que haber buscado lejos de donde está el presidente Sánchez-Simón.