Las medias crían pulgas, dice el adagio popular. Y lo está viviendo en sus propias carnes Lali Sánchez, directora de Onda Real de Las Palmas y ex directora de la revista Anarda, vendida recientemente a la vía plateada, representada para la ocasión por el polifacético Francisco Palero. Anarda y Onda Real de Las Palmas compartían muchas cosas en el pasado, entre otras, co-propietarios y centralita de teléfonos. Los primeros no están dando problemas, pero la segunda sí. Como quiera que tal artilugio se encontraba en las dependencias que ocupaba la revista, en El Sebadal, y ahora acaba de trasladarse esa publicación a la calle de La Pelota, sus nuevos rectores decidieron arrancar con el cacharro. No se percataron, o sí, no sabemos, de que colgados de tal centralita estaban los teléfonos de la radio, que pagó a medias (3.000 euros) la adquisición del aparato. Onda Real se ha quedado momentáneamente sin teléfonos, pero ha puesto el caso en manos de los tribunales. Palero, representante empresarial de actividades diversas, clasificadas y a veces insalubres, quizá debiera cuidar ciertos modales. No es por nada.