Pablo Barbero es, con diferencia, el mejor concejal que tiene Juan José Cardona en el Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria. Conciliador, optimista, positivo, trabajador y experto en lo que hace, trata de dar impulso a un sector, el turístico, que lleva tantos años en declive que por poco que consiga habrá conseguido mucho. La apuesta por el turismo de cruceros, la regeneración de la zona de Santa Catalina, la promoción de la ciudad entre los turistas que llegan al Sur de la isla y la búsqueda de una imagen promocional efectiva son retos interesantes. En ese empeño creó recientemente LPA Visit, y algunos expertos en la materia le recomendaron que se replanteara el logotipo ante la decisión de IATA de suprimirlo del indicativo del aeropuerto de Gran Canaria, que era precisamente la artimaña publicitaria a la que pretendía aprovechar el concejal capitalino. Este jueves, gracias a un comunicado en el que se relataba una de sus acciones para promocionar el destino entre los guías turísticos del Sur de Gran Canaria, descubrimos que el LPA ha sido sustituido por LPGC, que viene siendo precisamente lo que en CANARIAS AHORA venimos utilizando constantemente para referirnos a la ciudad de Las Palmas de Gran Canaria, imposible de meter en un titular, en una camiseta, en una calcomanía? Otras ciudades con menos complicaciones, menos palabaras y menos sílabas hace tiempo que lo resolvieron: Nueva York (NYC), Barcelona (BCN)? y termina funcionando. A ver si ocurre lo mismo con LPGC, que encima respeta el nombre completo, cosa que no hacía LPA.