Cinco cosas que quizás no sabes de Amy Winehouse
'Rehab' fue un éxito por accidente
La canción que hizo famosa en todo el mundo a Amy Winehouse nació por casualidad. Durante un paseo con su productor Mark Ronson, la cantante hablaba de los intentos de sus amigos para que abandonara el elevado consumo de alcohol. Y que se rehabilitara. Así arranca Rehab, su primer éxito global: „They tried to make me go to rehab. I said no, no, no“. ”La escribí como surgió de mi cabeza, solo estaba bromeando“, aseguraba Amy.
La verdadera historia de sus tatuajes
La imagen que quedó de Amy Winehouse es la de una mujer repleta de tatuajes. Pero la leyenda popular no es del todo cierta. La cantante solo tenía once tatuajes. El primero que se hizo fue una silueta de Betty Boop en una de sus nalgas. Otro rasgo característico de la extraordinaria voz de Camden era su cabellera. Su pelo con trenzas a lo rasta llegó a medir hasta 16 centímetros en una joven que apenas alcanzaba 1,59 metros de altura.
El aviso del amigo Bryan Adams
Cuando Amy Winehouse fue encontrada muerta en un apartamento de Camden Square, muchos se lamentaron del trágico final de la cantante. Abundaron los lamentos públicos y muchos dijeron entonces que se lo esperaban. Sin embargo, solo Bryan Adams le había dedicado una advertencia previa. Fue en 2008. En la canción Flower grown wild el músico canadiense habla del peligroso consumo de drogas. “Ella era la chica de la primera fila...”
Primero el teatro, luego la prensa
Con apenas doce años, Amy Winehouse consiguió una beca para cursar estudios en la escuela de teatro Sylvia Young en Londres. Alumna perezosa y con malos hábitos, fue expulsada al poco tiempo por “no esforzarse lo suficiente”. Después probó suerte en los medios de comunicación y trabajó durante un tiempo como reportera de calle. Parece que no era lo que se había imaginado y abandonó la prensa porque le parecía “muy aburrida”.
Su cocktail favorito se llamaba RickstasyRickstasy
Aficionada a las bebidas fuertes, Amy Winehouse combinaba varios tipos de licores en su copa favorita. El cocktail se llama Rickstasy e incluye tres partes de vodka, una parte de bourbon (si es posible Southern Comfort, era su predilecto), una parte de licor de plátano y otra parte de licor de crema tipo Baileys. Solía consumirlo en los pubs emblemáticos de su barrio de Camden, lugares como Hawley Arms, The Good Mixer y The Dublin Castle.