El futuro del Festival de Coachella, en duda
MADRID, 6 (EUROPA PRESS)
Uno de los festivales más emblemáticos amenaza con echar el cierre en 2014 y cambiar de emplazamiento. Las razón no es otra que una subida de impuestos ideada por las autoridades locales ex profeso de cara a próximas ediciones del evento. Sin embargo, tras la disputa entre promotores y autoridades hay también intereses inmobiliarios.
La historia se remonta a unos meses atrás. En marzo, Goldenvoice, organizadora del Coachella, que desde 1999 se celebra en Indio (sur de California) mostró su interés a las autoridades locales por adquirir más de 113 hectáreas de terreno en la ciudad.
Dichas hectáreas comprenden un club de polo y los terrenos donde se viene celebrando tradicionalmente el Festival de Coachella, por el que han pasado artistas como Jarvis Cocker, Radiohead, Kanye West, Paul McCartney o Leonard Cohen.
Con las conversaciones entre Goldenvoice y las autoridades locales en marcha, uno de los miembros del Ayuntamiento de la ciudad, Sam Torres, llevó al consejo la posibilidad de aplicar un impuesto del 6 por ciento sobre las entradas de futuras ediciones del festival.
Dicho impuesto, que aumentaría en 18 dólares el precio de las entradas del evento, ha supuesto un punto y aparte entre las autoridades y los organizadores del Coachella, que ahora están evaluando la posibilidad de llevarse el festival a otra parte.
La propuesta ya fue descartada por el Ayuntamiento, pero Torres ha puesto en marcha una recogida de firmas ciudadana para sacarla adelante. El concejal afirma que, de aplicarse, la ciudad recaudaría 4 millones por el festival, en lugar de los 830.000 dólares actuales.
La preocupación de las autoridades locales no es tanto el precio de las entradas como que la subida de impuestos ahuyente la oferta de Goldenvoice sobre las 113 hectáreas o incluso futuras ediciones del Coachella, informa 'The Desert Sun'.
Aunque unos y otros admiten que el desierto es un elemento imprescindible del festival californiano, lo cierto es que el dinero puede más y ha estancado las negociaciones entre ambas partes, cuyas obligaciones contractuales se desconocen.
Según señala el diario, el contrato firmado por Goldenvoice con Indio no es público y lo único que se sabe es que para la edición de abril de 2012 se acordó alargar el evento a dos semanas consecutivas. Dicho acuerdo sigue vigente para la edición de 2013.
Del mismo modo, se desconoce la suma ofrecida por los promotores por los terrenos, aunque, de adquirirlos, el Festival de Coachella quedaría ligado indefectiblemente durante mucho tiempo a Indio, además de abrir nuevas opciones a otro tipo de eventos.
Así las cosas, de momento lo único garantizado es que en 2013 se celebrará una nueva edición del festival -que vendió su primera tanda de pases en solo dos horas- cuyo cartel todavía se desconoce. La de 2014, de momento, sigue en el aire.
