Ruiz-Mateos considera injusta su detención y cree que Emilio Botín “tendría que acompañarle”
MADRID, 22 (EUROPA PRESS)
El empresario José María Ruiz-Mateos manifestó, al ser detenido esta mañana en su domicilio del barrio de Somosaguas en Pozuelo de Alarcón (Madrid), que el presidente de Banco Santander, Emilio Botín, a quien siempre ha culpado de la caída de Nueva Rumasa, “tendría que acompañarle”.
En declaraciones a Cuatro Televisión, recogidas por Europa Press, Ruiz-Mateos dijo: “quiero una huelga de hambre para hablar, que todo el mundo se entere de la realidad de los hechos”.
Al ser preguntado si consideraba injusta su detención, respondió de forma afirmativa y aludió al banquero. “No quieren que hable porque tienen miedo”, agregó.
También hizo referencia al fundador del Opus Dei, José María Escrivá de Balaguer, “un santo gigante, enorme, inmenso”, para subrayar que “si viviera, esta barbaridad no ocurriría”.
El empresario gaditano sigue detenido en la Comisaría de Pozuelo de Alarcón, a la espera de ser trasladado “bajo custodia” policial ante el Juzgado de Instrucción número 3 de Palma, en el que está citado a declarar este jueves a las 12.00 horas por una presunta estafa en la compraventa de un hotel.
Según ha informado el Tribunal Superior de Justicia de Madrid en un comunicado, el juez titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 4 de Pozuelo de Alarcón en Madrid, en funciones de guardia, ha dado instrucciones precisas a los efectivos policiales mediante un oficio y una providencia para que ejecuten el requerimiento de la magistrada de Palma y trasladen a Ruiz-Mateos.