Duro revés para Sarkozy en las elecciones regionales
PARIS, 15 (EUROPA PRESS)
La elevada abstención y el resurgir del ultraderechista Frente Nacional se han convertido en los protagonistas de las elecciones regionales celebradas ayer en Francia en las que se ha impuesto la izquierda y en las que el partido gobernante ha sufrido un claro revés que la prensa no duda en atribuir al presidente, Nicolas Sarkozy. De hecho, los 20 miembros de su gabinete que concurrían no han ganado en la primera vuelta y muchos lo tienen muy difícil para la segunda.
Según los resultados prácticamente definitivos, la abstención se sitúa en el 53,64%, es decir, más de la mitad de los 43,6 millones de franceses que estaban llamados a las urnas. De los que votaron, el 11,6% lo hizo por el Frente Nacional de Jean-Marie Le Pen, que tras el mal resultado en las legislativas de 2007 (4,29%), ha conseguido superar el umbral del 10% de los votos en doce regiones y por tanto obligará a que haya una segunda vuelta a tres con los socialistas y la gubernamental Unión por un Movimiento Popular (UMP).
El histórico político ultraderechista, de 82 años, ha superado incluso el 20% de los votos, al convertirse en el tercer candidato más votado en la región de Provenza-Alpes-Costa Azul, con el 20,3%, mientras que su hija, Marine Le Pen, es la segunda más votada en Norte-Paso de Calais, con casi el 19%.
Ante este buen resultado, la vicepresidenta del FN ha dejado claro que no formará alianzas e impondrá triangulares a la UMP y la PS. “No nos someteremos a nadie, estamos ahí para oponernos a un pacto UMP-PS”, aseguró en declaraciones en France-Info, acusando a los dos partidos mayoritarios en el país de “complices y culpables de la política que se lleva a cabo en las regiones”.
Por su parte, Jean-Marie Le Pen se felicitó de que su partido, por el que es eurodiputado, vuelva a “recuperar el lugar que es el suyo pese a los problemas financieros” y agradeció al Gobierno el que haya abierto el debate sobre la identidad nacional --que ha generado una agria polémica en Francia-- ya que, según él, ha “beneficiado” al Frente Nacional.
En esta misma línea se pronunció la líder del Partido Socialista, Martine Aubry, que en declaraciones a France Inter este lunes acusó directamente a Sarkozy de haber “reabierto la puerta” al FN con su debate sobre la identidad nacional que busca, según ella, “enfrentar a los franceses de aquí con los franceses venidos de fuera o a los extranjeros”. “Habría que preguntarse por qué se recupera el Frente Nacional cuando habíamos conseguido marginarlo”, señaló.
VICTORIA SOCIALISTA
Según los últimos resultados, los socialistas y sus aliados se imponen con el 29,48% de los votos y habrían sido la opción más votada en trece regiones, mientras que la UMP y sus aliados han ganado en ocho regiones y obtenido el 26,18% de las papeletas. La tercera fuerza más votada ayer fue Europa Ecología, con el 12,47% del respaldo.
Estos resultados, según ha destacado la propia Aubry, acercan al PS a “uno de sus niveles históricos más altos” y les aproximan al 39,1% de los votos logrados en las regionales de 2004, y mejorarían con creces su 16,18% obtenido en las elecciones al Parlamento Europeo del pasado junio.
“Los franceses han enviado un mensaje claro y fuerte, hoy (domingo) han expresado su rechazo a una Francia dividida, angustiada y debilitada y sobre todo han querido expresar su deseo de una Francia a la vez más justa y fuerte”, señaló anoche Aubry.
También en Europa Ecología están muy contentos con su resultado. Su líder, el eurodiputado Daniel Cohn-Bendit, se felicitó de que “la izquierda puede ganar en todas las regiones”. “Ninguna fuerza política, sea cual sea, podrá ganar sola una región”, subrayó. Así las cosas, su partido y los socialistas ya han comenzado a discutir una fusión de listas.
Según informa 'Le Figaro', las conversaciones comenzaron anoche mismo tanto en París como en las distintas regiones y se prolongaron hasta avanzada la madrugada, para retormase esta misma mañana. Los contactos transcurrieron en un “clima amistoso” y el 'número dos' de los Verdes, Jean-Vincent Placé, saludó “la voluntad de Martine Aubry y la dirección del PS de ser claros”.
De acuerdo con el diario, tanto socialistas como ecologistas coinciden en que el acuerdo debe ser para todas las regiones y no para casos puntuales y superar las diferencias surgidas en la etapa final de la campaña y que han distanciado a ambas formaciones.
SARKOZY, CULPABLE
La prensa parece tener claro el culpable de este varapalo para la UMP y habla de “voto sanción” para Sarkozy. Desde 'Libération' se subraya la “desbandada” que ha experimentado la derecha, que “ha realizado uno de sus peores ejercicios de su historia” en estos comicios.
Mientras, 'Le Figaro' resume la jornada de ayer afirmando que se trata de “un revés para la UMP, una satisfacción para el PS y una esperanza para los Verdes'. No obstante, el diario, al igual que el izquierdista 'L'Humanité', resalta que la elevada abstención debería ser motivo de preocupación también para la izquierda, ya que los franceses no acudieron en masa a las urnas para un ”referéndum anti Sarkozy“.
De esta misma opinión se muestra el económico 'Les Echos', que señala que la abstención pone de manifiesto “un desafío profundo frente al poder político, sea cual sea su color”. “Esta fue una elección de rechazo, no de proyecto”, resalta el rotativo en su editorial.
MAL RESULTADO DE LOS MIEMBROS DEL GOBIERNO
Este rechazo lo han sufrido en sus propias carnes los 20 miembros del Ejecutivo de Sarkozy que optaban a un puesto a nivel regional o departamental. En Aquitania, el ministro de Trabajo, Xavier Darcos, aunque ha mejorado el resultado obtenido hace seis años, tampoco conseguirá esta vez arrebatar la presidencia de la región al candidato socialista.
En Poitou-Charentes, el secretario de Estado de Transporte, Dominique Bussereau, está abocado a la derrota frente a la ex candidata socialista a la presidencia francesa Ségolène Royal, que le aventaja ya en casi diez puntos, con el 38,98% frente al 29,46%. La misma suerte parece que correrá el titular de Agricultura, Bruno Le Maire, en Alta Normandía, donde también pierde ya por diez puntos frente a su rival socialista.
Tampoco les ha ido mejor a los miembros del gabinete que optaban a puestos a nivel departamental. Así, el ministro del Interior, Brice Hortefeux, se sitúa en segundo lugar tras los socialistas en Puy-de-Dôme, al igual que el ministro para las Relaciones con el Parlamento, Henri de Raincourt, en Yonne.
Pese a ello, en la UMP no parecen tirar la toalla. Anoche, el primer ministro, François Fillon, incidió en que “todo está abierto” tras la primera vuelta y “nada está decidido para la segunda vuelta en muchas de las regiones francesas”. No obstante, hizo un llamamiento a los votantes de su partido a “movilizarse para la segunda vuelta más allá de las etiquetas partidistas”.
Por su parte, el secretario general de la UMP, Xavier Bertrand, rechazó hablar de “voto sanción”. “¿Dónde está el voto sanción (al Gobierno) si uno de cada dos franceses no ha ido a votar?”, se preguntó, advirtiendo de que “no ha llegado el momento del triunfalismo”. Como Fillon, llamó a los votantes a movilizarse y vaticinó un resultado “muy ajustado en muchas regiones”.
En el Elíseo, según 'Le Figaro', tienen claro lo que hay que hacer en la semana por delante para la segunda vuelta: “cortejar a los abstencionistas”, “resaltar el compromiso ecológico del Gobierno” para desmovilizar a los votantes de Europa Ecología y recordar a los electores del Frente Nacional que “votar FN es votar al PS”. Además, Sarkozy se movilizará y mañana mismo se desplazará a la región afectada por el temporal de principios de mes acompañado del cabeza de lista de la UMP.