El Cabildo de La Palma adquiere por 1,2 millones “dos pozos estratégicos” en La Herradura para “reforzar el sistema hidráulico de la isla”

El Cabildo de La Palma, a través del Consejo Insular de Aguas (CIALP), ha formalizado la adquisición mediante compraventa directa de “dos pozos estratégicos ubicados en el Barranco de La Herradura, en el municipio de San Andrés y Sauces”, indica en una nota de prenas. La operación, añade, que ha supuesto una inversión de 1,2 millones de euros, permitirá “la puesta en marcha de estas infraestructuras para reforzar de manera inmediata el sistema hidráulico de la isla”.

El presidente insular, Sergio Rodríguez, señala que esta actuación se enmarca en la estrategia del Grupo de Gobierno de activar pozos productivos, en situación legal, que se encontraban parados para hacer frente a la demanda de agua. Los pozos, hasta ahora titularidad de la Comunidad de Aguas La Herradura, cuentan con obras de perforación ya ejecutadas, lo que garantiza el aprovechamiento de caudales en un acuífero costero que se encuentra poco explotado en la zona.

El informe técnico del Consejo Insular de Aguas destaca que la adquisición “es una oportunidad clave debido a la localización estratégica de las captaciones y su proximidad a las principales balsas de regulación del norte de la isla”.

Ambos pozos, se apunta en la nota, cuentan con unas profundidades de 86 y 230 metros, registrando aforos históricos de unas 300 y 480 pipas por hora, respectivamente. En conjunto, el potencial de aportación se estima en unas 500 pipas por hora, un volumen significativo que vendrá a dotar de mayor resiliencia al sistema insular.

Sergio Rodríguez hace hincapié en que la reactivación de estos pozos es fundamental para la gestión de las reservas hídricas de la isla. Al encontrarse en el entorno de las balsas de La Laguna de Barlovento, Adeyahamen, Bediesta y Las Lomadas, su puesta en marcha permitirá una gestión mucho más eficiente del agua pública.

La aportación de estos pozos, se añade en la nota, también servirá para mantener el agua en altura procedente de Marcos y Cordero, permitiendo llevarla hacia La Laguna de Barlovento. Desde allí, se podrán regular los caudales para atender de forma equilibrada las demandas de ambas vertientes de la isla, siendo estos los únicos pozos en la zona que pueden cumplir este objetivo estratégico.

Con esta adquisición, el Consejo Insular de Aguas da “un paso definitivo en la seguridad hídrica de La Palma, optimizando recursos existentes y mejorando la capacidad de respuesta ante las necesidades de los agricultores y el consumo de la población palmera”.