El Parlamento pide a propuesta de NC un plan desarrollo integral sostenible para norte de La Palma
El Parlamento de Canarias ha pedido este jueves, 18 de mayo, por unanimidad al Gobierno de Canarias que elabore un plan de desarrollo integral sostenible, compatible con el medio natural, para el norte de La Palma, una de las comarcas más deprimidas y olvidadas de las islas, con problemas de despoblación, desempleo, envejecimiento y pobreza.
La iniciativa ha partido de Nueva Canarias, que originalmente focalizaba el problema en los municipios de Tijarafe, Puntagorda, Garafía y Barlovento, pero tras una enmienda del PSOE se ha incluido también a San Andrés y Sauces y Puntallana.
En la proposición no de ley, aprobada en la Comisión de Economía y Conocimiento del Parlamento, se reclama al Gobierno que, en primer lugar, declare el norte de La Palma como Área de Actuación Especial y que en consecuencia realice un diagnóstico socioeconómico profundo en colaboración con las universidades.
La pérdida de población, la alta tasa de envejecimiento, los índices de pobreza y marginación, el declive de las actividades relacionadas con el sector primario, la falta de relevo generacional en la actividad agropecuaria y el deterioro y carencia de servicios públicos básicos son algunos de los puntos que deben ser estudiados.
A partir de ese diagnóstico, según el acuerdo parlamentario, el Gobierno de Canarias deberá presentar un plan de desarrollo integral sostenible, compatible con el medio natural, y con implicación del Cabildo de La Palma, los ayuntamientos de la comarca y los agentes económicos y sociales.
El plan de desarrollo debe incorporar programas cuatrienales con su correspondiente financiación para generar nueva actividad económica y crear empleo, según la petición del Parlamento.
La diputada de Nueva Canarias Esther González explicó que el noroeste de La Palma ha perdido el 10% de su población en la última década, con el municipio de Garafía a la cabeza con un descenso del 20%.
La tasa de desempleo es del 32%, ocho puntos más que la media canaria, la renta media anual de 13.500 euros (frente a 26.200 del conjunto del archipiélago) y la tasa de envejecimiento es del 26% (por un 15% de media canaria).
A esto se añade la falta de infraestructuras y servicios, relató la diputada de NC, y sentenció que “esta comarca no se priva de nada, de nada malo”.
Manuel Marcos Pérez, del PSOE, consideró urgente una actuación específica para el norte de La Palma, y Asunción Delgado, de Podemos, aseguró que hay herramientas para promover un desarrollo local y rural sostenible en esta comarca y en cada comarca de las islas, pero el Gobierno apuesta por el modelo de turismo de masas, construcción y especulación en el territorio.
“Esta zona podría estar llena de terrenos cultivados, de granjas, de fábricas para hacer compostaje y mermeladas”, sugirió la diputada de Podemos, quien confió en que esta iniciativa no quede en papel mojado.
Juan Ramón Hernández, de CC, consideró que la situación en el norte es extensible a toda la Isla, y lamentó que se hayan intentado muchas actuaciones y todas han fracasado, entre otras razones por la dependencia del sector primario (30% del PIB insular) y por “la superprotección” medioambiental, ya que el 60% de la superficie insular está protegida, impidiendo otras actividades económicas.
La solución pasa por dar más presencia relativa en la economía insular a otros sectores, y al respecto lamentó las “insolidarias” críticas a la construcción del puerto de Tazacorte, que precisamente pretende abrir la economía del noroeste al turismo, a la importación de grano para el ganado y a la exportación de plátano.
Ese desarrollo se está intentando también con la ley de islas verdes, subrayó Hernández, en lo que coincidió con el diputado de ASG Jesús Ramos, quien defendió que esa norma, junto a la futura ley del suelo y al plan de desarrollo de Canarias contribuirán a crear riqueza en las islas occidentales.
