“Debemos detectar los ‘micromachismos’ de la vida cotidiana para avanzar en la igualdad”

La prestigiosa educadora tinerfeña Rosario Pino ha participado este sábado, en el Museo del Puro de Breña Alta, en el encuentro ‘Sin mujeres no hay democracia’ que ha organizado la Consejería de Asuntos Sociales del Cabildo en el marco de los actos conmemorativos del 8 de Marzo.

En el encuentro participaron mujeres representantes de distintos ámbitos de la sociedad palmera, junto a la consejera insular de Asuntos Sociales, Jovita Monterrey, y el alcalde de Breña Alta, Blas Bravo.

Rosario Pino ha manifestado a LA PALMA AHORA que “no sólo debemos hablar de la democracia paritaria como deseo, sino que es necesario detectar los ‘micromachismos’, esas pequeñas incrustaciones del generalizado sistema androcéntrico que se dan en la vida cotidiana y que primero hay que detectar para poder transformarlas y avanzar en la igualdad”.

Esta educadora considera que en la conmemoración del 8 de Marzo “es importante mirar un poco al pasado, porque nada se nos ha regalado a las mujeres que no hayamos conquistado; y también mirar al futuro, todo lo que nos queda por caminar, sabiendo que lo podemos hacer porque la historia se construye desde la libertad”.

En la mirada al presente, Pino propone “una prueba que hay que pasar: la igualdad, igual voz de las mujeres en distintas circunstancias”. “En estos momentos las cuotas están prestando un servicio, aunque tienen muchos detractores, pero sí sería deseable avanzar hacia una sociedad que asuma realmente la diversidad como un valor importante, y que las mujeres no tuviéramos que recurrir a ese mecanismo, que de momento, cumple una función, la discriminación positiva, pero deseamos que no fueran necesarias”, dijo.

Puso de relieve la importancia que tiene para el conjunto de las féminas y para la sociedad en general “el empoderamiento de las mujeres” y destacó que “los hombres tienen un papel muy importante que jugar en este empoderamiento, a veces dando un paso a un lado y otras, simplemente, apoyando la lucha de las mujeres”.

En la mirada al futuro, Rosario Pino asegura que hay “un horizonte utópico que es la igualdad absoluta, el disfrute de todos los derechos, deberes y libertades con exacta igualdad entre mujeres y hombres”. Recordó el objetivo que ha marcado Beijing+20 en Nueva York. “Simplemente lograr el 50 y 50 para 2020, por lo menos la equidad en la representación a todos los niveles en toma de decisiones”. Reconoce que esta meta “ciertamente, es medio utópica, pero no utópica del todo, es un realismo utópico, es una utopía bastante realista”, afirma. “Estos días las mujeres están luchando en Nueva York por lograr un planeta 50 y 50; muy bonito como slogan y como futuro a conquistar, y ahí tenemos que poner todos un poco de nuestra parte”, concluyó.