La portada de mañana
Acceder
La izquierda busca reconstruirse ante el nuevo ciclo político
El PP de Ayuso bloquea la investigación de los negocios de su pareja
Opinión - 'Un español cuenta algo muy sorprendente', por Isaac Rosa

Podemos pierde más de la mitad de sus votantes en Canarias en un mes

La candidata de Podemos a presidenta del Gobierno de Canarias, Noemí Santana, comparece ante los medios tras el varapalo electoral.EFE/ Quique Curbelo

Iván Suárez

Las Palmas de Gran Canaria —

Podemos ha sufrido un batacazo sin paliativos en las autonómicas celebradas el pasado domingo en Canarias. La formación morada, que ha concurrido en alianza con Sí Se Puede y Equo (Sí Podemos Canarias) ha perdido en menos de un mes, desde la celebración de las elecciones generales del 28 de abril (a la que acudió como Unidas Podemos, junto a IU y Equo) hasta esta última cita del 26 de mayo, más de la mitad de sus votantes, de 166.469 a 78.168. Una estrepitosa caída que, sin embargo, deja un pequeño resquicio para la esperanza en el partido, la remota posibilidad de entrar en un pacto de gobierno en las Islas que tendría como socios al PSOE, a Nueva Canarias (NC) y a los tres diputados de la Agrupación Socialista Gomera (ASG) de Casimiro Curbelo.

El secretario general de Podemos, Pablo Iglesias, manifestó este lunes por la mañana en declaraciones a La Sexta que su formación puede ser determinante para acabar con 26 años de gobierno de Coalición Canaria (CC). En similares términos se pronunció durante la noche electoral la líder del partido en las Islas, Noemí Santana. “Tenemos la esperanza de echar a CC”, dijo.

En cualquier caso, antes toca analizar los resultados. La coordinadora de la formación morada se reúne este martes con varias lecturas de la debacle sobre la mesa. Por un lado, la obvia, la pérdida de una parte del voto progresista con destino al PSOE o, lo que en muchos casos es lo mismo, la recuperación para los socialistas de los apoyos que emigraron en plena efervescencia de la formación morada. Pero también sobrevuela en Podemos un viejo fantasma de la izquierda en las Islas, el de la división interna, manifestada en estos últimos comicios en la renuncia sorpresa que protagonizaron en plena jornada electoral del 28A candidatas y candidatos vinculados al sector encabezado por la anterior secretaria general de la formación, la diputada nacional Meri Pita.

La decisión de estos militantes de abandonar la lista al Parlamento regional por la isla de Gran Canaria a pocas horas de que acabara el plazo para cerrar la plancha obligó al bando enfrentado, el liderado por Noemí Santana, a buscar, previo aviso de la Junta Electoral, una solución de urgencia y volver a confeccionar las papeletas para poder concurrir a los comicios del domingo.

En estas elecciones, Sí Podemos Canarias no ha podido confluir además con Izquierda Unida, formación que obtuvo algo más de 9.000 votos en todas las Islas.

Los resultados de este 26M han estado lejos de las expectativas de Podemos, que solo ha logrado mantener cuatro de los siete diputados con los que contaba en el Parlamento de Canarias; que tiene pocas opciones de entrar en los pactos de gobierno en los cabildos insulares -si acaso en uno en minoría junto a PSOE y NC en Lanzarote- y que ha cedido mucho terreno en alguno de sus principales bastiones, como Las Palmas de Gran Canaria, ciudad en la que ha perdido tres de sus seis concejales y una posición preponderante sobre NC a la hora de negociar las áreas de gobierno si se reedita el tripartito. En el otro lado de la balanza, la coalición con Sí Se Puede ha resistido en La Laguna (solo ha perdido un edil), lo que permite sumar una opción real de cambio y de alianza progresista en el municipio junto al PSOE y Avante La Laguna.

En el ámbito regional, los números son elocuentes. Unidas Podemos obtuvo 166.469 votos en las elecciones generales celebradas en abril. En la provincia de Las Palmas, la candidatura encabezada por la jueza en excedencia Victoria Rosell cosechó cerca de 91.000 votos, una cifra que colocó a la formación morada como segunda fuerza, por detrás del PSOE y por delante del PP. En Santa Cruz de Tenerife, la plancha liderada por Alberto Rodríguez quedó en cuarto lugar tras lograr el respaldo del 14% de los votantes de la provincia, 75.492 ciudadanos. Tres años antes, los datos habían sido aun más positivos, con el partido rondando los 200.000 sufragios en el Archipiélago.

Con un nivel de participación menor (57% frente al 68% del 28A), Sí Podemos Canarias ha quedado relegada este domingo a quinta fuerza del Archipiélago, por detrás de PSOE, CC, PP y Nueva Canarias, con el apoyo de 78.168 ciudadanos en las listas insulares y de 75.781 en la regional. O lo que es lo mismo, con 88.301 y 90.688 apoyos menos, respectivamente, que en los comicios generales celebrados hace tan solo un mes. En datos porcentuales, ha perdido entre un 53 y un 54% de votos.

Etiquetas
stats