El alcalde de Mogán no tiene ''conciencia'' de haber cometido ni un solo delito
“No tengo conciencia de haber cometido ningún delito, y sólo será una resolución judicial firme y condenatoria la que me aparte del cargo”, insistió Francisco González, alcalde de Mogán en el pleno extraordinario solicitado por la oposición para votar su dimisión, después de haber resaltado la condición “justiciera” de su compañera de NC, Isabel Santiago.
El salón de plenos estuvo este lunes abarrotado de simpatizantes y detractores del alcalde que mantuvieron la compostura durante todo el acto, a excepción de una vecina del municipio moganero que acusó a Francisco González de haberla estafado.
La expectación de la cita fue mayor en los días previos, pero finalmente fue un pleno que transcurrió en menos de una hora y sin los esperados vítores e insultos de unos asistentes que simplemente mostraron una tímida pancarta con la leyenda “¡Márchate! Vete ¡ya!”. Quizá la convocatoria en horario laboral y los 39 grados de temperatura hicieron que se tuviesen que echar de menos los sentidos aplausos ante las intervenciones de uno y otro bando en el turístico municipio sureño.
Exceptuando el inicio de la sesión, en la que intervinieron varios concejales, el resto se centró en diversos encontronazos dialécticos entre el primer edil y la concejala de la oposición Isabel Santiago, a quien González restó su capacidad de “poder defender ninguna postura ni hablar de bajeza moral” pues sólo es “una simple secretaria”.
El alcalde apuntó a un presunto delito de prevaricación de quienes “han contratado en el Cabildo de Gran Canaria” a Isabel Santiago “por 23.000 euros para no trabajar”, dijo González. La concejala de NC puso de manifiesto la “soberbia y la prepotencia” de la persona que “falta el respeto a las mujeres y a las categorías profesionales inferiores”.
Santiago instó por tercera vez al alcalde de abandonar “el trono donde está sentado como un dios como si esto fuera una finca privada”. En el tono de sorna que Francisco González contestó a la concejala durante todo el pleno, destacó sus facultades de palabra invitándola a ser “su asesora”.
El insulso pleno transcurrió con la intervención de González que no permitió a Santiago ejercer el derecho de réplica ya que había terminado sus dos turnos de intervención, a pesar de que el reglamento obliga a que el proponente de la moción concluya. Antes de que ordenase votar la moción, acusó nuevamente a la concejala de “perjudicar” los intereses de los ciudadanos con “denuncias falsas que le cuestan dinero al Ayuntamiento”. Un consistorio que ha mejorado en todos los sentidos desde su llegada al poder y de ahí que los ciudadanos hayan revalidado el voto “a pesar del caso Góndola”, según él mismo explicó.
Finalmente, la sesión, monopolizada por las palabras de González, concluyó con los siete votos del grupo de gobierno en contra de la moción en la que se solicita la dimisión del alcalde, y seis a favor (NC, CCN, PSC-PSOE y CC), a falta del voto de la concejala de Nueva Canarias, Carmen Delia Melián, que no acudió al pleno al tener que atender su negocio. Un motivo que tampoco fue del agrado de González, pues “si no vino es porque no quiso”, manifestó.
El alcalde salió del salón de plenos ante un mínimo baño de multitudes que le ofrecieron los asistentes al salón y sin querer hacer declaraciones a los medios de comunicación, acusados nuevamente en el pleno de tergiversar sus palabras y reiterando su impoluta conciencia ante las presuntas imputaciones en Góndola.
