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El Ayuntamiento de LPGC no deja a La Carretera sin Juan Rejón y decide unir ambos nombres en la misma vía

Votación en La Isleta (ALEJANDRO RAMOS)

Canarias Ahora

Las Palmas de Gran Canaria —

El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha decidido iniciado los trámites para darle un nombre nuevo a la calle Juan Rejón, del una de las principales vías de La Isleta, después de someter a una consulta popular si debía seguir llamándose del mismo modo, o volver a la denominación de La Carretera.

Pese a que la mayor parte de las personas que acudieron a votar eligieron volver a dar a la vía su antigua denominación, el Consistorio ha decidido tomar una solución intermedia y ponerle el nombre de 'La Carretera Juan Rejón'.

El concejal del distrito Isleta-Puerto-Guanarteme, Sergio Millares, afirma en un comunicado que ha decidido que se unan las dos denominaciones, la que se votó en la consulta y la que actualmente ostenta la calle, para dar cumplimiento a las peticiones de todos los vecinos implicados. “Creemos que esta fórmula mixta recoge las dos peticiones mayoritarias entre los vecinos, la de los que votaron a favor del cambio del nombre actual por La Carretera, y la de los residentes en Juan Rejón, que no quieren modificarlo para evitar trastornos con las direcciones de sus domicilios”, explica.

El edil ha redactado un informe recomendando esta solución mixta que ahora deberá iniciar el trámite oficial que ha de desembocar en el nuevo rotulado de las placas de la calle. La Administración municipal explica que el proceso puede llevar varios meses ya que a la propuesta del concejal Millares le debe seguir un informe técnico, que luego ha de someterse a la junta de distrito y, si es aprobado, pasar seguidamente para su debate en el seno del Consejo Sectorial de Cultura. Si este Consejo ratifica la nueva denominación el último paso es que la propuesta sea votada por los concejales de los grupos políticos del Ayuntamiento en la Comisión de Pleno de Organización. Superado este último trámite, el cambio de nombre se comunica a Estadística para informar a los vecinos afectados y proceder al cambio de las placas.

El cambio de nombre de esta vía surge de la iniciativa aprobada en la junta del distrito Isleta-Puerto-Guanarteme de octubre pasado, que decidió abrir un proceso participativo a toda la ciudadanía del municipio, tal y como recoge el artículo 14 del Reglamento de Participación Ciudadana, para decidir si esta vía debería seguir llamándose Juan Rejón o La Carretera, denominación que tuvo la misma hasta mediados del siglo pasado. Esta consulta se celebró el 17 de noviembre de 2015, y en la misma, además del cambio de nombre de la calle Juan Rejón, se sometió a la decisión popular el uso del solar anexo al Castillo de La Luz donde estuvo situada la carabela colombina.

Finalmente fueron 837 los votantes los que, por una mayoría ajustada de 429 votos (51,5%) frente a 393 (47,2%), decidieron que la calle pasara a denominarse La Carretera. De los 837 vecinos de la capital que participaron en la votación, 548 eran residentes en La Isleta (el 65,5%), a los que siguen, a mucha distancia, los 40 votantes de Guanarteme (4,8%), los 31 de Escaleritas (3,7%), los 24 de Arenales (2,9%) y los 19 de Santa Catalina (2,3%). Los restantes 175 electores se corresponden con vecinos de medio centenar más de barrios del municipio que se acercaron hasta La Isleta para depositar su voto el pasado 17 de noviembre. De la propia calle Juan Rejón fueron 108 vecinos los que participaron con sus votos en la consulta, un 7,8% del total de electores registrados en esta vía.

El informe del concejal Millares asegura que, pese a que la votación sólo tenía carácter consultivo para el Ayuntamiento, el gobierno municipal va a tener en cuenta la opinión mayoritaria de los votantes y procederá a renombrar la calle como La Carretera Juan Rejón. “Es evidente que la representatividad de la consulta, desde el punto de vista de toda la ciudad, es claramente insuficiente, aunque a escala del barrio y de la propia calle Juan Rejón el valor de la muestra se incrementa notablemente”, explica Millares en su informe, “esto es lógico ya que se trata de la primera consulta de este tipo que se hace en la ciudad, y por tanto, no está lo suficientemente interiorizada por la ciudadanía”.

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