Bloques del muelle antiguo sirven como base de señales
Bloques del muelle antiguo de Santa Cruz se utilizan como soportes de las nueve señales repartidas por la ciudad que hacen las funciones de hitos para informar sobre la historia las baterías militares que había en la ciudad. Los sillares fueron desalojados de su anterior ubicación frente a la plaza de España a raíz de la construcción del túnel de la vía litoral. Todos ellos han acabado desperdigados alrededor de la farola del mar, en la estación de ferries, donde de los cerca de 80 metros lineales con los que contaba esta muralla original, apenas se han reconstruido diez.
La recuperación del resto se da por casi imposible ya que en estos momentos no hay dinero suficiente para proceder a la rehabilitación. Pero además, los bloques fueron desmontados sin numeración y sin ningún cuidado con lo cual se hace muy complicada su reconstrucción. Ahora ha trascendido que parte de estos sillares se emplean para construir la base de un total de 18 hitos que estarán repartidos por toda la ciudad. La financiación corre a cargo de Puertos, que de esta manera se ha ahorrado una buena cantidad de dinero y da utilidad a un material que estaba abandonado.
Hasta ahora únicamente se ha podido recuperar este trozo de muralla de diez metros de largo por uno de alto en donde se reflejan las huellas de uno de los disparos lanzado por los cañones de las tropas de Nelson. Pero los otros cientos de trozos del muelle antiguo se encuentran desperdigados alrededor de la farola del mar sin orden, ni protección alguna.
Y es que la valla que se instaló para evitar que este trozo de patrimonio fuese objeto de expolio, se encuentra en la actualidad en mal estado. Incluso, algunos indigentes han elegido la antigua marquesina allí existente para dormir. El Gobierno canario ya ha anunciado que no tiene dinero para rehabilitar lo que queda del muelle antiguo y sus intenciones son trasladar los bloques a un almacén de Puertos y proceder allí a su numeración, si así fuera posible.
El miembro de la tertulia 25 de Julio, Damián García Pulido, indica que la idea de que no se destrozara este trozo de la historia de Santa Cruz partió precisamente de este grupo de investigadores. Y si se consiguió salvar una parte del muro fue gracias a que algunos de los miembros estuvieron a pie de obra cuando fue derribado e insistieron en que, al menos este trozo, fuera numerado. García Pulido indica que la obra en su totalidad, “es de una importancia enorme” porque se trata del muelle más antiguo de Canarias y de las primeras actuaciones de ingeniería ejecutadas en toda España de estas características.
El coste del puerto original resultó muy elevado y se pagó con las aportaciones de los chicharreros. “Lo que han hecho no tiene nombre”, dice este investigador en referencia al abandono de los sillares. Recuerda que en su momento se reunieron con el alcalde, José Manuel Bermúdez, para evitar que se destruyera el muro.
“Al parecer algo conseguimos pero visto lo visto tampoco ha servido para mucho. Antes las obras públicas se planificaban evitando dañar el patrimonio, ahora tienes que mover el patrimonio para no interferir en las obras”, apunta. “Lo que me asombra es que no se cuide mejor esa reliquia en un museo, viendo el estado en el que se encuentra, o al menos, que se lo coloque un metacrilato protector con una reseña de su importancia”, indica el investigador. En la última sesión plenaria de Santa Cruz, el concejal del grupo municipal popular, José Carlos Acha, denunció el abandono de estos sillares que había saltado a los medios de comunicación por esas fechas, aunque el punto no estaba en el orden del día.
Los miembros de la tertulia no han tomado aún ninguna decisión sobre lo que van a hacer a partir de ahora. García Pulido indica que no sería mala idea reunirse de nuevo con el alcalde para promover algún tipo de iniciativa, como podría ser por ejemplo, que todos los grupos municipales apoyaran una moción institucional con el fin de presionar para que se reconstruya este trozo de la historia. En cuanto al uso que se le está dando a los sillares como soporte de los hitos, el investigador apunta que “al menos tienen una función noble”, aunque no sea la que ellos inicialmente pretendían.