El Cine Víctor vuelve a la exhibición de películas
El Cine Víctor, situado en la plaza de La Paz de Santa Cruz, abrirá sus puertas en el plazo aproximado de un mes al haberse alcanzado ya un acuerdo entre los dueños del recinto y la empresa EST ocio SL. Y además lo hará como sala dedicada de forma casi exclusiva a la exhibición de películas frente a aventuras empresariales anteriores en las que cabían casi todo tipo de actividades.
El contrato quedará firmado de forma definitiva el viernes por parte de los dueños de la sala y por otra del empresario Eladio Fraga, quien posee negocios similares en la isla. En realidad en el Cine Víctor se podrá realizar cualquier tipo de actividad que esté permitida por el reglamento del Ayuntamiento, pero en principio la exhibición de películas formará el grueso casi exclusivo de su programación.
El cine ha permanecido cerrado desde hace ya varios meses y mientras se han sucedido negociaciones con otros empresarios que hasta ahora no habían dado los frutos esperados. Sin embargo, por fin se garantiza que el local volverá a abrir sus puertas, una vez que se emprendan diversas obras de reforma, tales como la instalación de aire acondicionado. Con todo ello se garantiza la continuidad de la que está considerada como la sala de cine de pantalla única más antigua y única de Canarias. Una reliquia cultural que en varias ocasiones ha estado a punto de desaparecer, pero que por suerte siempre encuentra, casi en el último momento, quien la mantenga viva. En su momento incluso se llegó a crear una asociación que defendió su continuidad.
El conocido en realidad como Teatro Cine Víctor fue construido por el arquitecto José Enrique Marrero Regalado, autor en Tenerife de gran parte de los cines que se construyeron en la isla a principios del siglo XX. La Sala fue inaugurada el 22 de abril de 1954 con la proyección de la película musical británica, Los cuentos de Hoffman, lo que supuso todo un hito en la vida social y cultural de Tenerife. Marrero dejó plasmado en este edificio su característico estilo que se basaba en una decoración y diseño totalmente detallista.
Y así se puede apreciar en la fachada y en el interior de la Sala donde se buscó y consiguió una relación cercana entre el cine y el espectador. La ornamentación está compuesta por mármoles, cortinas de terciopelo, herrajes dorados y una decoración de gran calidad, que aún hoy se conservan en buen estado. El Cine Víctor tiene capacidad para 550 butacas en la parte baja y 225 en la superior.
Hasta 2002 funcionó como una sala de exhibición de películas al uso. Sin embargo, en abril de ese año el Cabildo tinerfeño alquiló el edificio para desarrollar una programación estable, caracterizada por cine independiente en versión original subtitulada. Dos años más tarde se celebraron en el recinto las proyecciones y actividades de la Filmoteca Canaria en Tenerife.
Sin embargo, el 31 de diciembre de 2008 finalizó el contrato de alquiler, que no fue renovado ya que la institución insular trasladó esta actividad al museo TEA y la Filmoteca a los cines Renoir Price. La decisión causó polémica, llegándose a crear una asociación en contra del cierre. Durante dos años fue explotado por empresarios que lo dedicaron a prácticamente todo tipo de actos, pero esta iniciativa finalmente fracasó. Ahora se abre una nueva etapa que servirá para mantener vivo el único cine de pantalla única que funciona en las islas. Lo que supone todo un hito.
