El PP asegura que no habrá reforma del Estatuto en esta legislatura
El secretario general del PP de Canarias, Asier Antona, ha asegurado este lunes en el Parlamento que no se va a reformar el Estatuto de Autonomía en esta legislatura porque no hay necesidad, ni consenso, y ha pedido al Gobierno regional que concentre sus esfuerzos en salir de la crisis.
Pese al rechazo del PP a abrir el debate de la reforma del Estatuto, tanto los grupos que apoyan al Gobierno -nacionalista y socialista- como el grupo mixto han mostrado su disposición a iniciar el proceso de reforma estatutaria en el Parlamento regional.
El representante del grupo nacionalista, José Miguel Ruano, ha considerado oportuno empezar a avanzar en la reforma del Estatuto para estar preparados desde el punto de vista institucional ante la posible recuperación económica.
Ruano ha defendido un Estatuto de consenso que fortalezca la estructura económica y social de las islas y, en especial, ha abogado por garantizar institucionalmente el Régimen Económico y Fiscal (REF).
El diputado del PSOE Julio Cruz ha justificado la necesidad de reformar el Estatuto por la política “recentralizadora” que, a su juicio, desarrolla el Gobierno de España y para garantizar las políticas públicas, así como el blindaje del REF.
También se ha mostrado a favor de un nuevo sistema electoral en el que las barreras electorales se sitúen en el 15 por ciento insular, el 3 por ciento regional y con una nueva circunscripción regional además de las insulares.
“La propuesta del Gobierno de Canarias es integradora y es un buen punto de partida”, ha dicho Cruz, quien ha pedido al PP que no se excluya del debate.
El portavoz del grupo mixto y presidente de Nueva Canarias, Román Rodríguez, ha señalado que el momento histórico de haber reformado el Estatuto fue la pasada legislatura y que esa oportunidad se perdió por los intereses personales y partidistas de CC, que usó al PP y al PSOE “como marionetas”.
No obstante, “a pesar del oportunismo de esta nueva iniciativa cuando se sabe que no hay posibilidades”, ha anunciado que su grupo participará en el proceso porque sigue pensando que es necesario contar con más competencias, un sistema de financiación suficiente y un REF protegido, así como un nuevo sistema electoral.
Precisamente desactivar la propuesta de reforma del sistema electoral presentada por Nueva Canarias es el motivo que está detrás de esta nueva iniciativa de reformar el Estatuto, según la percepción del diputado del PP Asier Antona.
Antona ha abierto su discurso garantizando que no habrá reforma del Estatuto esta legislatura porque no hay voluntad compartida, ni consenso político ni sentido de la oportunidad.
Según el PP, la reforma debería salir “de la voluntad compartida de todos los grupos parlamentarios” y ahora ni en la agenda política ni en la prioridad de los ciudadanos está este asunto.
Los ciudadanos reclaman que toda la atención de los políticos se centre en salir de la crisis, en reducir el desempleo y la pobreza y en emprender las reformas que lo hagan posible, ha argumentado, y en estos asuntos es donde están los desafíos de Canarias.
“Todos los esfuerzos y la energía deben dirigirse a reactivar la economía y a recuperar las condiciones de vida de los ciudadanos”, ha insistido.
Para Antona, la reforma propuesta es extemporánea, y ha sido enviada de forma unilateral por el Gobierno de Canarias sin el consenso del partido más votado en las islas, el PP, ni de la sociedad.
“El consenso es la clave del éxito” y no se puede imponer y pretender que el PP lo apoye a ciegas, ha advertido.
Antona ha manifestado que, mientras el Gobierno de Canarias intenta un Estatuto de última generación, “toda una generación de canarios está en las últimas”, y una reforma no va a resolver ni el paro ni la pobreza.
“No hay el menor interés social para esta reforma. El REF está perfectamente protegido y consagrado en la Constitución y en el Tratado de Lisboa”, ha considerado.
Antona ha instado a los grupos del Gobierno a no emprender una reforma condenada al fracaso, sin sentido de la oportunidad, sin consenso y sin necesidad.