El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria lleva a la Fiscalía los vertidos de La Laja
El Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria ha abierto un expediente informativo ante el vertido de aguas fecales que ha llevado a prohibir el baño en la playa de La Laja y ha puesto en conocimiento del Ministerio Fiscal lo ocurrido por considerarlo “muy serio”, según ha anunciado este martes.
Depurar las responsabilidades debidas respecto a un episodio cuya importancia se deriva de que atañe a cuestiones “que tienen que ver la salud y con el medio ambiente y que el código penal tipifica”, es la finalidad de esas iniciativas, ha dicho el alcalde de la ciudad, Juan José Cardona (PP), que ha expresado su propósito de “averiguar exactamente todo lo sucedido” al respecto.
“Creo que es nuestra obligación, cumplimos con nuestro principio de transparencia en un tema que es absolutamente fundamental y con el que no podemos distraernos ni jugar ni medio segundo”, ha recalcado.
Cardona ha hecho estas declaraciones durante una rueda de prensa en que ha dado a conocer que el Ayuntamiento, como venía barajando hacer desde tiempo atrás, ha acordado intervenir la compañía responsable de dicho vertido, la empresa mixta de aguas de la ciudad, Emalsa, por desacuerdos con su gestión y con su modelo de relaciones con la corporación.
Y ha querido desligar una cuestión de la otra, aludiendo a que desde la corporación entienden que factores ajenos han perjudicado a la compañía, al ser conscientes de que “ha habido un invierno duro y eso ha generado que la red de salida de las aguas pluviales y, en definitiva, el sistema, se haya colapsado y haya generado puntualmente una serie de vertidos al mar que no son habituales”.
“Sin embargo, eso no significa que nosotros exculpemos, disculpemos, seamos indulgentes o miremos para otro lado” ante hechos como ese, debido a que tienen repercusiones en materias en las que la corporación entiende que no debe haber “ni una sola alegría, ni una sola licencia”, ha indicado el alcalde.
En especial porque, “en los últimos días, Emalsa ha hecho cosas que, a nuestro juicio, no han estado bien, como no informarnos puntualmente de una serie de decisiones que tomó en relación a la paralización de la depuradora”, cuya conjunción con la rotura de un emisario submarino cuya mantenimiento no era el adecuado, en opinión del Ayuntamiento, ha motivado el vertido, ha añadido.
Cardona ha salido además, a preguntas de periodistas, al paso de un comunicado que ayer difundió la compañía de aguas asegurando que había avisado a tiempo a la corporación de sus planes de paralizar la referida estación depuradora, algo que ha insistido en negar.
“Ahí existen discrepancias y Emalsa puede emitir un comunicado, pero nosotros estamos en condiciones de acreditar lo contrario”, ha asegurado al respecto.
Al tiempo, el alcalde ha querido responder a las críticas que le ha dirigido desde la oposición municipal el PSOE ante estos hechos, con afirmaciones que ha dicho que apuntan a que la situación de los vertidos de aguas residuales en la ciudad está “absolutamente incontrolada”.
Eso es algo “absolutamente falso”, ha asegurado, acusando a los socialistas de hacer declaraciones así porque “utilizan la falsedad y la alarma social como arma política”, con el único “interés de desgastar al gobierno”.
Y ha señalado que prueba de ello es que esos vertidos se han situado en los últimos años, bajo su mandato, en los 8.143 metros cúbicos por día de 2012 y en los 8.629 de 2013, cuando en la etapa anterior, en la que era alcalde el socialista Jerónimo Saavedra, llegaron a ser 18.799 en 2010 y 19.106 en 2009.