El Defensor del Paciente pide una auditoría integral del sistema sanitario de Canarias para mejorar su eficiencia
El Defensor del Paciente reivindica la realización de una auditoría integral del sistema sanitario de Canarias para mejorar su eficiencia y “priorizar y reducir las listas de espera sanitarias en el Archipiélago”. La asociación las define como “escalofriantes”, ya que, según los datos que aporta, la cifra de jornadas de media para intervención alcanzan los 147 días y hay 27.165 canarios “engrosando la lista quirúrgica”.
Asimismo, afirma en su comunicado que las medidas adoptadas por el consejero José Manuel Baltar “siembran todo tipo de dudas” y que hay “un maquillaje encubierto”. El Defensor del Paciente asegura que se ha citado a pacientes para cirugías y consultas para 2021 y “no consta en el sistema informático” porque las agendas de ese año están cerradas para no contabilizar a los pacientes y sus demoras en los datos que se dan a conocer cada seis meses.
La asociación se muestra expectante de cara a este 2019 y espera comprobar si “los 24 millones de euros inyectados por el Ejecutivo regional a Sanidad para aumentar la actividad quirúrgica surten efecto”.
Falta de especialistas
En su balance sobre el funcionamiento del sistema sanitario en 2018, el Defensor del Paciente subraya la falta de especialistas médicos como una de las “mayores complicaciones”, en especial en el caso de los pediatras. Canarias se sitúa como una de las regiones más afectadas por este déficit.
Ante esto, la figura propone como medidas paliativas la estabilidad laboral, la retribución económica y el incremento de plazas MIR de especialidades deficitarias a través de ofertas de empleo público o el retraso de la edad de jubilación para que los médicos puedan seguir ejerciendo después de los 65 años. Las especialidades más afectadas por las jubilaciones, según el comunicado, son oncología, ginecología, oftalmología, anestesiología, urología y dermatología
El colapso de los servicios de Urgencias y el fraude de iDental son otros de los puntos débiles del sistema sanitario canario que ha detectado el Defensor del Paciente en 2018. La figura exige respuestas y soluciones ante “este flanco que constituye un atentado contra el derecho fundamental a la salud y la vida de la población canaria”.
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