Jueces y fiscales, llamados este miércoles a la huelga
Los jueces y los fiscales están llamados a participar este miércoles en una huelga para protestar contra la politización del Consejo General del Poder Judicial, la “privatización” del Registro Civil y la “paupérrima” situación de medios personales y materiales que soporta desde hace décadas la Administración de Justicia.
Los miembros de la Carrera Judicial y Fiscal reivindican un incremento de la inversión pública y de la plantilla en los tribunales españoles al denunciar que el país ocupa el puesto 36 del ranking europeo con diez jueces por cada 100.000 habitantes, por debajo de países como Moldavia, Albania o Grecia y sólo por delante de Armenia, Azerbaiyán, Georgia, Malta y Dinamarca, un país con muy baja litigiosidad.
Además, reivindican un incremento de medios en la lucha contra la corrupción, modificar la Ley del Indulto, derogar o modificar “urgentemente” la ley de tasas y paralizar la reforma del órgano de gobierno de los jueces al convertirlo en “un apéndice” del Ministerio.
Los funcionarios de Justicia también están llamados a concentrarse entre las 11.30 y las 12.30 horas frente a sus centros de trabajo en una acción convocada por los sindicatos CSIF, CCOO, STAJ y UGT para clamar contra “decisiones vergonzosas” como es la “privatización” de los registros civiles que pone en peligro 3.500 puestos de trabajo.
Derecho de huelga en un vacío legal
No es la primera vez que la reclamación de refuerzos en los tribunales acaba con una huelga de togas. La primera huelga de la democracia tuvo lugar en febrero de 2009 contra el entonces ministro socialista Mariano Fernández Bermejo y desde entonces continúa el vacío legal sobre el derecho de los magistrados a ejercer o no la huelga.
El Consejo General del Poder Judicial (CGPJ) rechazó también fijar servicios mínimos para el día de la huelga general convocada el pasado 14 de noviembre al carecer este derecho de soporte normativo. Esta vez, la portavoz Gabriela Bravo ha mantenido el mismo criterio y ha estimado que la huelga “no es el camino” en el momento actual.
Precisamente, la confederación MEDEL, que integra a las asociaciones de magistrados europeos, ha expresado su “completo” respaldo a la huelga de jueces al ver legítima su potestad de ejercer esta medida de acción para censurar la gravedad de las reformas legislativas.
Los profesionales del sector se han levantado contra las reformas del ministro Alberto Ruiz-Gallardón y han manifestado, especialmente, un rechazo unánime al “tasazo” judicial durante los últimos meses.
El propio ministro anunció la pasada semana que revisaría a la baja las cuantías, tras recibir las recomendaciones de la Defensora del Pueblo, Soledad Becerril, quien está a expensas de estudiar la propuesta definitiva del Ministerio antes de decidir si presenta o no un recurso de inconstitucionalidad contra la ley, en vigor desde diciembre y recurrida ya por el Grupo Parlamentario Socialista.
“Improvisación e imposición”
Pero no es sólo el fondo lo que ha suscitado el malestar de los operadores jurídicos, también las formas del titular de Justicia. Abogados, consumidores y sindicatos integrantes en la Plataforma Justicia para Todos critican la “improvisación” y el modelo “impuesto” por el ministro, mientras que los jueces afirman que la huelga se ha convertido en la “única salida” tras las llamadas a la negociación de sus reformas.
Gallardón también ha apostado por el “diálogo y la negociación” frente a la vía de la huelga, aunque ha recordado que ésta ha sido convocada “por unas asociaciones, que no son mayoritarias, dentro de la Carrera Judicial”.
Las asociaciones representativas de la Carrera Judicial fueron invitadas en enero por el Ministerio a abordar el nuevo modelo del CGPJ pero éstas declinaron las reuniones porque eran “de forma separada” y no se las consultó durante la elaboración de la reforma. Sólo la Asociación Profesional de la Magistratura (APM) aceptó la cita al encuadrarla como una “entrevista institucional” con su nuevo presidente, Pablo Llarena.
Precisamente, la APM, mayoritaria en la Carrera y de carácter conservadora, es la única que se ha descolgado de la convocatoria de huelga, junto con la Asociación de Fiscales. La Asociación Profesional de la Magistratura lamenta esta acción cuando existe una crisis que se proyecta en “tremendas dificultades sociales y un descrédito institucional larvado y emergente”.
No obstante, la APM ha registrado una división entre sus asociados cuando ha consultado a las bases sobre la protesta. Entre otras, la Sección Territorial de Andalucía, que representa a la cuarta parte de la totalidad de la asociación, ha manifestado su adhesión a la huelga.
La protesta ha sido convocada por la Asociación de jueces y magistrados Francisco de Vitoria, Jueces para la Democracia, Foro Judicial Independiente, la Unión Progresista de Fiscales y la Asociación Profesional e Independiente de Fiscales.
Además, ha contado con el apoyo de la Plataforma Justicia para Todos, que reúne al Consejo General de la Abogacía Española, el Consejo de Consumidores y Usuarios y los sindicatos CCOO, UGT; CSI-F, USO y STAJ. Con todo, estos colectivos han manifestado su disposición a dialogar y abrir la vía de negociación.