Sacar a Juan Carlos I del callejero de Las Palmas de Gran Canaria, en manos del PSOE

La avenida en honor al rey emérito en Las Palmas de Gran Canaria podría tener los días contados. La Plataforma Felo Monzón organizó este martes un encuentro con los grupos políticos del Ayuntamiento de Las Palmas de Gran Canaria para debatir sobre el cambio del nombre de la avenida Juan Carlos I. Unidas Podemos y Nueva Canarias votaron a favor de la iniciativa del grupo de dejar el tramo, que comprende desde la rotonda de Las Ramblas hasta la glorieta del Hospital Universitario de Gran Canaria Doctor Negrín, con el nombre de la vía contigua y que iba a tener desde un principio, avenida Pintor Felo Monzón.

Ciudadanos se ha abstenido ya que, como ha asegurado Néstor Doreste, uno de los promotores de la iniciativa, el partido “prefiere que le pongan nombre de mujer a la avenida”. También se ha abstenido la concejala no adscrita Carmen Guerra y Beatriz Correas, por su parte, votó a favor, al igual que Unidos por Gran Canaria. El PSOE no envió representante pero ha prometido al colectivo que “se lo está pensando”. Doreste afirma que “todo depende del PSOE”, al ser mayoría en el Consistorio capitalino.

La postura del PP, partido que gobernaba en la ciudad con José Manuel Soria como alcalde cuando se propuso el nombre de actual rey emérito, sigue siendo la misma que hace un par de décadas. En 1996, un tramo longitudinal que discurre durante aproximadamente 3,5 kilómetros en un barrio de Las Palmas de Gran Canaria fue bautizado con dos nombres. Pintor Felo Monzón, uno de los artistas más importantes de Canarias, iba a ser inicialmente la denominación que recibiera toda la vía. Pero ante la visita de Juan Carlos I, el entonces alcalde de la ciudad capitalina José Manuel Soria impuso que un tramo recibiera el nombre del rey emérito.

Este colectivo ciudadano, conformado por más de 120 personas, quiere hacer hincapié en que es “un grupo apolítico” y que son “constitucionalistas”, con un gran respeto por la Monarquía“. Sin embargo, señala Doreste, ”el rey emérito se ha convertido en un personaje indigno. La ciudad de Las Palmas de Gran Canaria no merece tener en su callejero el nombre de un señor que ha robado dinero público“.