La UE quiere fichar a los extranjeros que atraviesen sus fronteras
La Comisión Europea propuso este miércoles fichar a los extranjeros que entran en la UE, dentro de un plan para controlar las fronteras exteriores comunitarias frente a la inmigración ilegal, el terrorismo y el crimen organizado.
El plan incluye también la posibilidad de crear un sistema electrónico de autorización de viajes a la Unión Europea (UE), y la puesta en marcha de un registro de viajeros de bajo riesgo que entreguen previamente datos personales y crucen las fronteras por puertas automatizadas.
Además, se propone reforzar la agencia Frontex, con la posibilidad de crear un cuerpo europeo de guardias fronterizos, y crear un sistema europeo de gestión de las fronteras de la UE en el este y en el sur (ribera mediterránea).
Los ciudadanos de terceros países serían fichados a su entrada en territorio comunitario -con datos biométricos como un escáner de la cara o de las huellas dactilares- para controlar cuando salen de la UE y saber si se quedan ilegalmente.
Frattini destacó que las personas que llegan legalmente a la UE para un período temporal pero luego se quedan de forma indebida constituyen “el factor número uno” en la inmigración ilegal“, y no las personas ”desesperadas“ que llegan en embarcaciones a España, Italia o Malta.
Este registro de entradas y salidas constituye la principal novedad de los planes presentados este miércoles, y la Comisión no prevé que esté operativo para 2015.
Un registro de viajeros “de buena fe”
Además, la CE plantea la creación de un registro de viajeros habituales y “de buena fe” que de forma voluntaria entreguen previamente datos biométricos y de su pasaporte, de forma que puedan cruzar rápidamente los pasos fronterizos en los aeropuertos a través de puertas automatizadas.
Cuatro aeropuertos europeos, entre ellos los de Londres-Heathrow y Amsterdam-Schiphol, ya tienen mecanismos de este tipo que realizan escáneres del iris de los ojos de los viajeros, cuyos datos han sido almacenados en su primera visita.
“Queremos facilitar los viajes de las personas honradas y a la vez impedir la entrada de terroristas, inmigrantes ilegales o delincuentes”, afirmó el comisario europeo de Justicia, Seguridad y Libertades, Franco Frattini, en una conferencia de prensa.
Estas iniciativas deben estar en marcha en un período de entre 5 y 7 años, según explicó Frattini.
La UE registra cada año 300 millones de entradas y salidas por sus fronteras exteriores: 160 millones de ciudadanos comunitarios, 60 de países que no requieren un visado de entrada y 80 millones de personas procedentes de países a los que sí se exige un visado.
Frente a algunas dudas y preocupaciones surgidas de miembros del Parlamento Europeo acerca de las consecuencias de estas medidas en las libertades individuales y la privacidad de los datos, el comisario aseguró que la información será protegida “por la más estricta legislación europea de protección de datos”.
Frattini rechazó también las críticas a los que creen que quiere poner en marcha una “fortaleza Europa”, al señalar que no se busca cerrar a la UE del resto del mundo, sino que la Unión sea “capaz de hacer respetar la ley”.
“Hay que acoger a los que vienen legalmente, pero no se puede tolerar a los que violan las leyes”, insistió.