UME, preparados para salvar vidas arriesgando las suyas
?Desde el pasado año 2006, la Unidad Militar de Emergencia (UME) está instalada de forma permanente en Gran Canaria. A pesar del importante papel que jugó en la extinción de los incendios de Gran Canaria y Tenerife, es la gran desconocida del Ejército español. Esta unidad constituye un importante refuerzo a los cuerpos de seguridad del Estado.
La UME es una fuerza conjunta formada por personal de los tres Ejércitos. En Gran Canaria, su base está en Gando. La unidad cuenta con 77 miembros, estructurada en cuatro compañías. Se organizan en dos pelotones de hombres y el apoyo de otro de perros de rescate. El capitán al mando, José Antonio Prieto, y dos brigadas llevan el mando de la unidad.
El capitán Prieto conoce a la perfección su unidad y asegura que tan importante son estas cuatro compañías como las tecnologías de comunicación. “Las transmisiones son la base de todo para el perfecto funcionamiento y coordinación de la unidad”, asegura. La unidad se completa con dos vehículos autobomba de ataque al fuego, autobomba nodriza, vehículo Aníbal, camiones, autobuses, ambulancias y dos vehículos de transmisiones (Mérida y León).
Sin embargo, esta unidad de Gran Canaria no está aún al completo, “esto será posible antes de que finalice 2008, ya que somos cinco batallones en toda España y hay que ir proviendo a todos de las infraestructuras necesarias”. Aún así, en esta base están preparados para atacar incendios, rescatar personas bajo escombros con perros, hacer trabajos de desescombros, demoler de estructuras, extraer agua o lodo en inundaciones, realizar evacuaciones en helicóptero y rescatar a náufragos.
“Nuestra prioridad es la vida, por eso recibimos formación permanentemente. Debemos garantizar la seguridad de todos”, confiesa el capitán Prieto. Los efectivos realizan cursos en la Península, maniobras de extinción de fuegos en La Cumbre, formación académica militar y preparación física en la base a diario. Se organizan en dos pelotones, uno de alerta y otro de refuerzo. En todas las unidades de España se enseña a actuar de la misma forma para que todos los militares procedan igual y puedan apoyar a otras unidades en cualquier sitio.
El día a día en la UME
Actualmente, que no está ocurriendo ninguna situación de riesgo, los hombres de la UME invierten su tiempo en prepararse para ello. “Nuestros efectivos son evaluados continuamente mediante cursos en diferentes partes de España, maniobras para extinción de fuegos en La Cumbre, formación académica militar y preparación física en la base a diario”, cuenta Prieto.
Un día de trabajo en Gando comienza a las 7.00 horas y acaba a las 16.30. La parte inicial del día se centra en formación física o militar: natación, carrera continua, pruebas de resistencia, etcétera. Luego se pasa a la instrucción de armamento y mantenimiento en la que los soldados reciben instrucciones precisas para actuar indistintamente en los dos pelotones de la unidad. Posteriormente, asisten a diferentes tipos de cursos: embarcación, extinción, escalada, buzo, inmersiones, riesgos químicos o mercancías peligrosas. Ya por la tarde, el trabajo concluye tras recibir formación académica para ascender en el cuerpo o sobre materias específicas como transmisiones.
La UME tiene una manera particular de actuar. Hay dos pelotones, uno de alerta (que está permanentemente en la base y debe acudir en menos de dos horas desde que se declara la emergencia) y uno de refuerzo (que puede estar en cualquier punto de la isla y tiene un máximo de 6 horas para ir a apoyar al primer pelotón). En todas las unidades de España se enseña a actuar y se recibe la misma formación, ya que, según el capitán Prieto, “es la única manera de garantizar que todos los militares procedan igual y puedan apoyar a otras unidades con todas las garantías de coordinación y eficacia como quedo demostrado en los incendios de Gran Canaria y Tenerife”.
José Antonio Prieto asevera que “gracias a este sistema, en los incendios de Gran Canaria y Tenerife no hubo que lamentar víctimas mortales”. Durante estos desastres naturales, Bomberos, Protección y Civil y la propia UME recibieron muchas críticas. La palabra “descoordinación” y “desconocimiento” se repitieron en los medios. Sin embargo, el capitán Prieto asegura que “todo el personal a su cargo sí estaba preparado, las comunicaciones entre los pelotones fueron efectivas y las ordenes que se dieron fueron perfectamente ejecutadas porque el personal y el equipamiento tecnológico es el mejor con el que se podría contar”.
Entrar a formar parte de la Unidad
Para entrar a formar parte de la UME, se exige una buena preparación. Lo primero, haber superado un mínimo de tres años de carrera militar. A partir de ahí, “cuando el Ministerio de Defensa publique las plazas vacantes de cada Comunidad Autónoma y los requisitos a cumplir para optar a ella, se presenta la solicitud a la plaza que, además, es de libre asignación. Si te eligen como candidato, realizas una primera fase de selección en Toledo con pruebas físicas y psicológicas. Los elegidos de aquí irán a un campamento de selección durante cinco semanas. Y sólo los que lo superen entrarán a formar parte de la UME”.
Así, los primeros pasos de la UME fueron la colaboración en el incendio del pasado verano demostrando que es una herramienta del Estado para sumar esfuerzos, contribuir a resolver eficazmente las emergencias y que está a la altura de las circunstancias en situaciones límite.