José A. Reverón: “Mis principios van más allá que ser de izquierdas o de derechas”

José Antonio Reverón González fue un innovador en 2011, cuando se presentó a las elecciones municipales en Arona tras crear en un tiempo record, poco más de tres meses, un nuevo partido, Ciudadanos por Arona, apoyado por plataformas sociales y colectivos vecinales, sin más ideología, dice, que la de “regenerar la política local que hasta ahora beneficiado a unos pocos y perjudicado al resto de los aroneros”.

En 2015 volverá a optar por la Alcaldía, con un equipo que aún está abierto pero que ya cuenta con Raquel García García, que hasta hace unas semanas era presidenta del PP y concejala por ese partido en el municipio del sur de Tenerife, y con Javier Moisés Melián, que también ha abandonado el partido conservador para unirse al proyecto de Reverón.

“Ciudadanos por Arona no tiene nada que ver con la formación que lidera a escala nacional Albert Riera, C’s. Nuestra ambición es sólo local. Únicamente, y no es poco, aspiramos a regenerar Arona, y que deje de ser un nido de corrupción política”.

Hace cuatro años, sin apenas medios y con una campaña municipal de boca a oreja, Reverón González logro los votos suficientes para ser concejal y destapar una de las mayores tramas de corrupción político-urbanística que se han conocido en Canarias, el caso Arona 1, a la espera de que se señale la vista oral y que sentará a 17 personas en el banquillo, entre ellas al ex alcalde José Alberto González Reverón y todo su ex equipo de Gobierno, además de empresarios y técnicos del Ayuntamiento.

Recalificación de terrenos, concesión de licencias de construcción sin los informes preceptivos, tratos de favores, cobros de comisiones millonarios… El ex alcalde fue inhabilitado en sentencia firme por dos contratos a dedos. Ahora se enfrenta a una condena que conlleva prisión y 35 años de inhabilitación.

Y toda esa trama fue desvelada por el líder de Ciudadanos por Arona, ex militante socialista, que contó con los abogados Felipe Campos y Antonio Espinosa para hacerla llegar hasta la Fiscalía para Delitos contra el Medio Ambiente y el Territorio de Santa Cruz de Tenerife.

“Nacimos antes que el 15-M y que Podemos”, afirma Reverón a Tenerife Ahora. “No como un partido más, marcado por la ideología, sino que nos une el sentido práctico, la idea de crear un equipo de personas con capacidad de gestión, con preocupación por el medio ambiente y por el bienestar de los aroneros, y con principios. No queremos estar bajo las siglas de otras formaciones, no quiero pertenecer a ninguna secta. Yo sólo soy alguien con principios que van más allá de ser de izquierdas o de derechas”.

Uno de los pilares de su programa es la ordenación urbanística de Arona, después de que los tribunales hayan echado por tierra un Plan General de Ordenación que durante 20 años ha estado en el limbo “mientras unos cuantos se repartían trocito a trocito nuestro municipio”, matiza Reverón.

El Cabildo, enemigo público

El objetivo primero, recalca, es lograr que se apruebe un nuevo Plan General de Ordenación “acorde con el medio ambiente y con los vecinos” y para ello tiene claro que el enemigo a batir es el propio Cabildo, al que responsabiliza de estar detrás de las irregularidades cometidas en Arona desde al menos 2003 hasta la actualidad. Y desde las costa de Los Cristianos hasta las alturas de Águilas del Teide.

“Sí, parece que el Cabildo de Tenerife sea el enemigo público de Arona, primero con Ricardo Melchior, que patrocinó el proyecto de la gran ciudad de Cabo Blanco, contemplada en el Plan Insular de Ordenación de Tenerife (PIOT) y que yo mismo denuncié ante Bruselas, y ahora con su sucesor, Carlos Alonso y sus planes de Renovación y Modernización turística”.

Según el líder de Ciudadanos por Arona, esos planes nacidos al amparo de la Ley 2/2013 de 29 de mayo y publicados el pasado 14 de diciembre, “lo único que buscan es aprobar, deprisa y corriendo, actuaciones puntuales que estaban en el Plan General que ha anulado los tribunales”.

Se refiere a nuevas actuaciones en Los Cristianos y en Costa del Silencio, con proyectos de centros comerciales y ampliaciones de plantas hoteleras, entre otras.

“Son parcelas que en realidad están en manos del Cabildo y de la Banca, los mismos de siempre desde hace años”, apunta José Antonio Reverón, con un estilo de hacer política, que es el sello de Coalición Canaria, que se centra en una red clientelar. Mientras, los vecinos de Arona hemos sufrido una auténtica sangría porque hasta el servicio de playas está privatizado y tenemos una pésima red de transporte públicos“.

A la pregunta de por qué sólo aspira a gobernar en Arona, responde con un ejemplo: “Si en mi casa hay problemas, tendré que solucionarlos antes para poder luego arreglar los de fuera. Sin etiquetas”.